Luego de los graves incidentes con hinchas de Talleres y Vélez durante el partido de ida de la Copa Libertadores, la Justicia investiga cuál pudo haber sido el disparador que ocasionó semejante gresca que dejó heridos de gravedad y muchos simpatizantes de la 'T' lastimados.

En la mañana de este jueves, se dieron dos situaciones importantes de cara al duelo de vuelta en Córdoba: Conmebol pedirá un informe, pero no clausurará el Amalfitani ante una eventual semifinal y además, se canceló la opción de visitantes en la revancha de Córdoba.

Ahora lo que la Justicia porteña está investigando, más allá de las responsabilidades, es cómo se originaron los incidentes y cuál fue el disparador. Una de las hipótesis, según pudo saber Doble Amarilla, involucra a una presunta interna de la barrabrava de Talleres y a violentos de "tercera línea" de la 'Pandilla de Liniers'.

¿Cuál es la conexión? Fuentes judiciales indican que un grupo disidente de barras de Talleres estaría enfrentado con la conducción actual. Si bien la dirigencia de la 'T' lo niega, sí reconocen que han habido diferencias con algunos barrabravas que actualmente se encuentran detenidos. En ese marco, la facción oficial iba a compartir un asado con sus pares de Vélez, por lo que la disidente decidió agruparse en Parque Sarmiento y asistir por su cuenta. Además de mostrarse a la vista de todos, desde ahí se movilizaron todos a la cancha.

Al llegar al Amalfitani, la barra disidente de los visitantes fueron a la Platea Sur Alta, donde se desató la gresca, y algunos apuntan a que las entradas llegaron a sus manos por los propios dirigentes de la 'T', ya que los 350 tickets que poseían se los dio Vélez al conjunto cordobés y tenían destino de familiares y dirigentes.

La barra "oficial", ubicada en la popular local con los de Vélez, al ver todo a la distancia, agitó el tema y la tercera línea de la barrabrava local se movilizó hasta la platea y terminó iniciando el ataque que terminó con heridos graves, a tal punto que una persona está cerca de perder el ojo.

Ahora, las preguntas surgen: ¿Cómo ingresaron? ¿Cómo estuvieron toda la tarde en el Parque Sarmiento sin que ningún organismo de seguridad se alertara sobre la situación? 

Desde ya, esto deja en la mira al Comité de Seguridad de Fútbol de la Ciudad de Buenos Aires por no prevenir esta situación. Los próximos días serán clave para determinar hasta dónde escala este gravísimo hecho.