(KAZÁN, Rusia) - Luego de la desilusión que significó despedirse en la primera fase de Sudáfrica 2010 y el sinsabor de los cuartos de final de Brasil 2014, la selección francesa llega al Mundial de Rusia con la ilusión de ser protagonista y dar el golpe: el primer paso será en la primera fecha del grupo C ante Australia en Kazán.

Sin el defensor Djibril Sidibe, lateral derecho del Mónaco que está en recuperación de una lesión de rodilla, el técnico francés Didier Deschamps echó mano de Benjamin Pavard, central del Stuttgart, para ese lugar de la cancha en el debut ante los "Socceroos" dirigidos por el holandés Bert van Marwijk.

Despejada la duda de la titularidad de Kylian Mbappé, Francia tendrá enfrente un equipo australiano que buscará arrancar con el pie derecho y dejar atrás sus últimas dos expectativas mundialistas en Sudáfrica y Brasil. 

Tras un primer tiempo chato, en el que no se lograron sacar diferencias, el segundo comenzó con mucha acción. A los 56' se produjo una jugada dudosa en el área de Australia, para lo cual el árbitro acudió al VAR para chequear la situación. Finalmente, sancionó un polémico penal que a los 58' Griezmann cambió por gol.

Cuatro minutos después, es decir a los 62', en una jugada de ataque de Australia, y tras un centro, el francés Umtiti levanta la mano y toca la pelota en el área. Penal para Australia y gol de Jedinak. 

A los 80' y gracias a la pulsera que poseen los árbitros, Francia -en contra de Behich, jugador australiano- sacó ventaja una vez más y decretó el 2-1 final.