(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Ariel Holan sufrió, festejó y vive estas horas como lo que es: un hincha fanático de Independiente. ¿Las últimas como DT? En pleno verde césped del Maracaná, bañado en lágrimas y en bebida energizarte, cortesía de sus jugadores, Holan, quebrado, admitió: “No sé si voy a seguir. Sufrí mucho y mi familia también”. Acto seguido, “Doble Amarilla” contó el detrás de escena de esas palabras y narró los motivos por los cuales, hoy, está mucho más afuera que dentro del Club.

Horas después de conocida la información que contó este portal, empezó el operativo clamor de los hinchas del ‘Rojo’ que quieren que Holan sea el conductor del equipo en busca del regreso a conquistar América, en la Copa Libertadores 2018. Saben que lo único que puede “torcer” al DT es eso: el amor por los colores. El que exhibió cada vez que pudo y del que ahora, los hinchas del ‘Rojo’ se aprovechan para hacerlo recapacitar. ¿Podrán? Por lo pronto, Holan vivió la noche del Maracaná con sus hijas y, en el avión de regreso, se mostró desenfrenado. Lo impactó muchísimo la obtención del título y no puede desconocer el gran desafío deportivo que serán las tres copas Internacionales que el club jugará en el próximo año (Recopa, Suruga, Libertadores)

Ahora vendrá la fiesta, la celebración en el Libertadores de América y una navidad ‘de Miel’. Sin embargo, cuando todo esto pase, el escenario será exactamente el mismo que ya contó, en la noche del miércoles, “Doble Amarilla": La relación entre Holan y la dirigencia que encabeza Hugo Moyano está rota desde hace un mes y medio, pero algo está clarísimo: nunca fue la ideal.  Es el quiebre sobre algo ya desgastado. Es pasar de estar desflecado a quedar despedazado. Holan viene madurando la decisión junto a su familia, sus amigos y su círculo de trabajo. Además, contamos que, sobre la mesa del DT, ya hay ofertas varias y variadas, desde México, con una propuesta fantástica desde lo económico, y dos Selecciones: Paraguay y Chile. La propuesta guaraní sería la que más seduce al DT.

Si anuncia su adiós en los próximos días, Holan le cargará el crédito al apriete de Bebote. Dirá que fue determinante y que está cansado de vivir con custodia y prefiere irse del país. Es cierto, pero lo que realmente molestó sobre ese tema, fue el (no) accionar de la dirigencia, ante lo acontecido. El diálogo de Holan con los principales dirigentes es tirante y, en el último mes y medio, no se habló mucho con Pablo Moyano. El DT puertas adentro habla de que “no lo defendieron”, “que lo expusieron” y además, dirá que jamás se creó el contexto para que no estuviera expuesto ante la barra e, internamente, sabe que ese contexto, quizás, nunca llegué. Esa es la razón más poderosa detrás de las palabras del entrenador al finalizar el partido que lo consagró y que tatuó su apellido en la historia de Independiente. 

Ahora, habrá que ver si el amor de los hinchas del Rojo es capaz de torcer la decisión que tendría prácticamente tomada el hombre que revivió la mística del club, otro hincha fanático como ellos. En el medio, vuelan las acusaciones de traición, entre el DT y la dirigencia. Así como Holan se sintió expuesto, débil, solitario y falto de escudos ante el episodio con Bebote, la dirigencia tiene fuertes sospechas de que el DT  tampoco los defendió en la causa. Es más: tienen la información de que hizo lo contrario. ¿Gloria y adiós o el amor será más fuerte?