(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El freezer intencionado en el que se metió el debate sobre el futbol de la selección argentina está en sintonía con la guerra fría planteada entre Claudio Tapia y Daniel Angelici, este último que pretende tener la última palabra sobre el futuro técnico y pretende que el mismo sea un integrante de la escudería Bragarnik.


Con un vínculo que va mucho más allá de la pelota, Angelici y Bragarnik pretende estar en la misma sintonía para tener injerencia directa en el sucesor de Jorge Sampaoli, un DT al que eligió fundamentalmente el propio vicepresidente de la AFA y presidente de Boca.


Tras un mea culpa público sobre la determinación del por entonces técnico de Sevilla para traerlo a Ezeiza de cara al Mundial de Rusia, Angelici lanzó la bomba de humo de Alejandro Sabella para competir con el nombre instalado de José Pekerman.


Si bien el propio José no tiene todo el consenso para volver a desembarcar como manager en las selecciones argentinas, Angelici puso sobre la mesa a Sabella, sin siquiera consultarlo al propio DT del equipo subcampeón en Brasil 2014. Recuperado clínicamente, Sabella no pretende semejante lugar de exposición y mucho menos volver a aterrizar en Ezeiza en una AFA dividida. 


Sin embargo, el operativo de instalar su nombre e incluso plantear que tiene un plan para el corto plazo en la Copa América logra su objetivo de discutirle el escenario público a la opción Pekerman, que cuenta con varios adeptos en el círculo íntimo de Tapia.


La real lucha de Angelici es tener injerencia final en el técnico y para ello cuenta con un aliado histórico del Mundo Boca –incluso con llegada al presidente Macri- y una persona de referencia en el entorno del Tano.


Bragarnik ya estuvo en varias postales de selección en los últimos años y en el imaginario de esta sociedad se imaginan al representante en la primera fila de la presentación del nuevo DT… pero ¿quién aparece en esta nómina? El número uno es Jorge Almirón, luego en la cola se ubica a Ariel Holan e incluso le enviaron un mensaje al propio Matías Almeyda que para desembarcar en Ezeiza tendría que hacer un acuerdo express.


La próxima reunión de Comité Ejecutivo de AFA, que será la semana próxima o la otra, volverá a poner frente a frente a Chiqui y al Tano, y ahí quedará en claro cuánto de estas propuestas son reales o resultaron solo bombas de humo en una guerra fría que tiene como botín el futuro de la Selección Argentina.