(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Benfica, el club más ganador de Portugal, está siendo sacudido desde principios de septiembre por un escándalo de corrupción. Resulta que, a raíz de la filtración de algunos correos electrónicos, se hizo de público conocimiento que la institución habrían intentado amañar varios partidos de la liga lusa en el pasado. Pero, por si fuera poco, ahora las acusaciones van más allá: habrían intentado sobornar a árbitros con trabajadoras sexuales.

'Correio de Manha', 'Record' y 'O Jornal Económico', medios del país europeo, indican que los e-mails contienen las pruebas necesarias del ofrecimiento de servicios de prostitutas y hasta del pago de habitaciones de hotel. Gran parte de los encuentros sexuales se habrían producido entre 2013 y 2014 en un lujoso hotel de Lisboa.

Portada de un diario de Portugal
Portada de un diario de Portugal

En un intento por limpiar su imagen, Benfica desmintió todas las acusaciones a través de un comunicado, en el que dejaron claro que intentarán probar la falsedad de la información: ''Mantenemos una posición firme y clara, la que anunciamos al comienzo de esta historia: no hay hechos que puedan justificar ninguna acusación de este proceso. Haremos todo lo posible para eliminar estos cargos absurdos e injustificados''explica el club.

Los correos exponen un lazo estrecho entre Paulo Goncalves, ex asesor de la institución, y Nuno Cabral, ex delegado de la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional. El caso, bautizado como ''E-Toupeira'', llevó a la Fiscalía a acusar a 'las Águilas' de 30 delitos y pedir penas de entre medio año y tres años sin poder disputar competencias. Además de sobornos, se habla de ''falsedad informática, violación de secreto, violación de deber de sigilo y corrupción activa''