No hay acuerdo salarial: pactan una nueva reunión en España para definir si la Liga femenina se juega o continúa la huelga
Este lunes, la patronal y los sindicatos no llegaron a un acuerdo. Se volverán a reunir en una mediación para definir si se iniciarán la jornada de fútbol o si habrá un paro.
La Liga femenina de Primera División de España atraviesa por una huelga a días del comienzo. Este martes habrá una reunión para definir si se llega a un acuerdo o si efectivamente se realizará paro.
La patronal y sindicatos de la Liga F se encontrarán en la sede del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) en donde se buscará llegar a un acuerdo para definir si la competencia comienza este viernes o si se suspende.
La Liga F cuenta con representación de la presidenta Beatríz Álvarez; el vicepresidente Rubén Alcaine; el director estratégico Pedro Malabia; la representante de Atlético Madrid Lola Romero y el de Athletic Club Egoitz más los abogados. En tanto, los cinco sindicatos estuvieron representados: FUTPRO, AFE, Futbolistas ON, UGT y CC.OO.
Los sindicatos proponen un salario mínimo de 20.000 euros para la temporada anterior, 25.000 euros para la actual y 30.000 euros para la siguiente. Esta no es la única parte a negociar, también quedarían por revisar cuestiones como antigüedad, formación, maternidad, derechos de formación y protocolos de abusos, según relata Marca.
Cabe remarcar que la patronal señaló su sorpresa ante la convocatoria de huelga durante las negociaciones y pidió unas horas para realizar una ronda de consulta con los clubes. En tanto, desde los sindicatos manifiestan que existe un estancamiento en las negociaciones desde la última reunión, que se realizó el 4 de julio.
No es la primera huelga que se realiza en la Liga femenina de España: en noviembre de 2019 tuvo lugar debido a que no hubo acuerdo entre los sindicatos y la Liga para la redacción del primer Convenio Colectivo. Luego, la temporada pasada tuvo lugar la segunda, en una situación similar a la actual, ya que el comienzo de la competencia se retrasó una semana por el paro de las árbitras, quienes solicitaron que se profesionalizara la rama.