Tras el fiasco en el Gran Premio de Bahréin, en el que Esteban Ocon finalizó 17º y Pierre Gasly en el 18º lugar, dos directivos de Alpine presentaron la renuncia a sus cargos.

Horas después de la carrera, tanto Matt Harman, director técnico del equipo, como Dirk de Beer, jefe de aerodinámica de la escudería, dieron un paso al costado. 

Según resaltan los principales especializados, las dimisiones fueron aceptadas, sin embargo, las renuncias no se harán efectivas de manera inmediata, ya que ambos seguirán trabajando en el equipo hasta finales de abril.

Lo cierto es que estas salidas se suman a los despidos de toda la cúpula encabezada por Otmar Szafnauer a mitad del año pasado. Esta decisión, en lugar de ser un revulsivo para el equipo, profundizó aún más los problemas.

Los test de pretemporada constataron los problemas de sobrepeso del actual monoplaza y el desacuerdo entre los responsables técnicos del proyecto ha llevado a una situación crítica. En medio de esto, los dos pilotos se quejaron reiteradamente de su nuevo monoplaza, el A524, y lo han definido como "inconducible" y lo demostraron en la pista.