No todo es color de rosas en Red Bull. Sus autos funcionan de maravillas comandados por pilotos de primer nivel y el equipo tuvo una sólida actuación en el estreno de la temporada en el Gran Premio de Bahreín. Sin embargo, puertas adentro la escudería arde. 

El padre de Max, Jos Verstappen, ex piloto de Fórmula 1 que llegó a ser compañero de Michael Schumacher, le declaró la guerra abiertamente a Christian Horner, Director del Equipo, que quedó en el ojo de la tormenta tras ser absuelto luego de una investigación interna por parte de la compañía por “conductas inapropiadas” con una empleada. 

En declaraciones al Daily Mail, el neerlandés asegura que "habrá tensión en el equipo mientras Christian siga en su puesto. El equipo corre el riesgo de desintegrarse. No puede seguir así. Explotará. Se está haciendo la víctima, cuando es él quien causa los problemas". Ante la pregunta de si fue él quien filtró de las supuestas pruebas contra Horner, Jos Verstappen afirma que "no tendría sentido. ¿Por qué iba a hacer eso cuando a Max le está yendo tan bien aquí?".

Las incendiarias declaraciones de Jos Verstappen, junto con unas fotos que circulan por el paddock del padre de Max reunido con Toto Wolff en el hospitality de Mercedes anoche, tras la carrera de Bahrein, dispararon las alarmas.

De hecho ya hay quien especula que Max Verstappen podría irse a Mercedes como sustituto de Lewis Hamilton a partir de la próxima temporada 2025. Sería la contundente respuesta de Wolff a la jugada de Ferrari y de paso le serviría de venganza contra Horner por Abu Dhabi 2021.