Ryduan Palermo dialogó en exclusiva con Doble Amarilla y contó las sensaciones de firmar contrato con el Lenense de España. Además explicó las diferencias futbolísticas respecto a los otros países donde jugó y la influencia de tener a un ídolo del fútbol argentino como padre.

"Me llena de orgullo saber lo que significa mi viejo en la vida de mucha gente, él trata de aconsejarme lo máximo posible", señaló.

- DOBLE AMARILLA: ¿Con qué expectativas viajaste a España?

- RYDUAN PALERMO: Estoy con muchas expectativas. Mi último paso en Honduras fue muy bueno y pude jugar bastante. Mi idea con esta oportunidad era poder seguir encontrando ritmo y demostrando mi potencial dentro de la cancha. Lo tomo de la mejor manera, con muchas ganas y mucha ilusión.

- DA: En los pocos días que estuviste… ¿notás un cambio, desde lo deportivo, respecto a los países donde estuviste? ¿Es muy distinto el juego? 

- RP: Es una categoría baja, es la quinta división, es semi-profesional. La mayoría de los chicos trabajan y a algunos se les complica bastante el día a día, pero lo llevan lo más profesional posible. Me sorprendió el nivel. Pensé que iba a ser un nivel inferior, pero hay muy buenos jugadores. Tenemos un buen plantel para pelear arriba. El ritmo de juego es menor a otros lados, pero técnicamente hay jugadores buenos. Todavía no tuve la oportunidad de conocer a los otros equipos, pero por lo que vi en mis compañeros creo que será una categoría fuerte. Nos vamos a tener que armar bien para estar entre los primeros lugares.

- DA: ¿En qué país te sentiste más cómodo?

- RP: En todos me sentí bien. La gente me trató de 10. Nunca tuve problemas con la adaptación en los países, me adapto rápido. No tengo mucho problema con eso. Ahora con esta experiencia lo mismo. Los compañeros son geniales, la gente también. Es un pueblito muy chiquito y la gente es muy acogedora.

- DA: Si tuvieras que contarle a la gente quien es Ryduan Palermo… ¿qué le dirías?

- RP: Es un poco difícil hablar de uno, pero te diría que soy tranquilo, sacrificado y trabajador. Siempre trato de tirar para adelante, con buena energía y con positivismo. Y adentro de la cancha trato de entregar todo, siempre. De ser el primero que ayuda y se esfuerza, ser un jugador aguerrido y que busca el gol constantemente.

- DA: ¿Con qué soñas?

- RP: Siempre lo dije: mi sueño más grande es jugar en Boca. La vida te va llevando por otros caminos, pero ese sueño sigue intacto. Por lo pronto, tengo que disfrutar de esta experiencia y hacer lo mejor acá. Tengo mucho por delante, después se verá si sigo escalando, subiendo de categoría. Hay que ir pasito a pasito.

- DA: ¿Cuánto influye tenerlo a Martín como padre y que te aconseje? ¿Influye para bien o para mal (a veces)?

- RP: No sé si influye adentro de la cancha, sino afuera. Que te comparen o que seas el "hijo de" y no Ryduan. A lo largo del tiempo, mientras mejor me vaya, me van a conocer por Ryduan y no por ser el hijo de Martín. Llega un momento en que es cansador que siempre me lo digan, pero me llena de orgullo saber lo que significa mi viejo en la vida de mucha gente. Él trata de aconsejarme lo máximo posible, de traspasarme un poco lo que hizo él adentro de la cancha, movimientos y momentos. Cuando puede ver mis partidos y estamos en el mismo lugar, siempre está ahí.