Luego del duro golpe que significó la derrota en la final de la Copa Libertadores, Jorge Almirón decidió renunciar a su cargo como entrenador de Boca. De esta manera, cerró un ciclo de siete meses en el que dejó dudas sobre el rendimiento de visitante y en los clásicos.

Almirón asumió en el club y su debut se dio el 12 de abril ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro con derrota por 1-0. En total, dirigió 43 partidos de los cuales ganó 17, empató 13 y perdió 13, con una efectividad de 49,61%.

En condición de visitante, el Boca de Almirón no logró hacer pie y los números lo reflejan, ya que de 23 encuentros que disputó ganó seis, empató siete y perdió diez. A su vez, en los clásicos también quedó un saldo negativo: de ocho que dirigió ganó dos, empató dos y perdió cuatro. Entre las derrotas están las dos del Superclásico, la primera en el Monumental y la otra, en octubre pasado, en La Bombonera.

Los números del ciclo Almirón: desde un invicto que ilusionó a la deuda en los clásicos y en los partidos de visitante

El mejor momento del ciclo Almirón se dio entre el 30 de junio y el 24 de agosto, cuando el 'Xeneize' tuvo un invicto de 12 partidos, con nueve triunfos (cinco seguidos) y cuatro empates. 

Cabe remarcar también que en las series de Libertadores ante Racing y Palmeiras el equipo tuvo un buen desempeño, pero no fue eficaz por lo que las definió en los penales. Además, le dio rodaje a varios de los juveniles del club y el once titular terminó con un buen número de futbolistas surgidos de las inferiores como Valentín Barco, Cristian Medina, “Equi” Fernández, Nicolás Valentini y Alan Varela (que a mediados de año fue vendido a Porto). 

La final fue un duro golpe tanto para las expectativas del DT como para las de todo el mundo Boca y sentenció el futuro del técnico, que no tenía asegurada su continuidad más allá del 31 de diciembre, fecha en la que se vencía su vínculo. ¿Quién llegará para ser su reemplazo?