Augusto Costa, referente de la agrupación ‘Primero Vélez’, pasó por D-Sports Radio 103.1, y habló de toda la actualidad de la política de la institución fortinera. 

Desde el sector opositor habían juntado más de 2000 firmas de socios/as de la entidad con el objetivo de llamar a una asamblea extraordinaria, para adelantar las elecciones pactadas para el mes de noviembre, debido al pésimo momento institucional y deportivo que vive el club. Con el objetivo de las firmas concretado, debería llevarse a cabo una asamblea de representantes, tal como lo estipula el estatuto. 

Sin embargo, la actual CD rechazó el pedido y desde “Primero Vélez”, recurrieron a la Inspección General de Justicia. Al respecto, Costa dijo: "No es un golpe institucional, está en el estatuto. No nos dieron ningún argumento por el rechazo".

Sobre el inicio del conflicto entre él y Chilavert, remarcó: “Empezaron a aparecer afiches que decían primero hay que evitar que los kircheristas entren al club. Después decían Augusto Presidente y La Cámpora en gigante. Luego Chilavert 2023. Estas no son situaciones aisladas, sino hay una clara relación entre los hechos que referentes del club que ven una propuesta que Primero Vélez una propuesta que puede seducir al socio, intentan dividir y que los socios pierdan de vista lo que estamos proponiendo y lo llevan a una ideología política que no tiene nada que ver con lo que está sucediendo”

"A mí lo que me duele es que mi máximo ídolo deportivo tenga hacia otros socios una actitud tan negativa para buscar dividir. Chilavert vino a traer es división, odio, discriminación e intolerancia. Eso en Vélez no lo vamos a permitir", confesó. 

Y sentenció: "El oficialismo está en una situación muy complicada porque perdió legitimidad. El presidente parece no tener idea de lo que sucede en el club. No se hablan dentro de la comisión directiva".

Además, destacó uno de los principales problemas de la actual gestión: "Esta comisión directiva no escucha lo que quiere los socios. Los socios quieren transparencia y regularidad en los mercados de pases. Nunca ponen la cara y ponen policía para que los socios no entren al club".

 Y agregó: "Nuestra visión es ‘basta de quemar ídolos’, no queremos tirar nombres. Tenemos que discutir modelo de club, de gobierno y de gestión. Luego empezar a discutir proyectos concretos. El club es de los socios, ellos son los dueños. Por eso proponemos: fútbol competitivo, desarrollo deportivo, cultural, social y educativo, porque Vélez es mucho más que fútbol".

Por otra parte, Costa contó las situaciones que vio desde adentro, cuando era vicepresidente segundo, que no le gustaron y derivaron en su salida: "El contrato con los socios fue profesionalizar la gestión y la transparencia. Empezamos a hacer mejoras en lo administrativo, porque no tenían gestiones financieras ni transparencias, no le informaban nada a los socios. Todo eso que arrancó, empezó a ser muy difícil. Los directivos no tenían predisposición. Habían decisiones raras en los mercados de pases. Y situaciones internas como que el presidente dejó de convocar reuniones de comisión directiva. La salida de Heinze y la contratación de Ricardo Centurión también".

"Desde que dejé de ser dirigente de Vélez vi un club que tenía que hacer muchos cambios y generar mecanismos para ser más transparente. Lamentablemente el presidente y muchos actuales dirigentes tenían otra cosa en la cabeza", añadió.

Y cerró: "Les dije a la comisión directiva que por ese camino no iba a estar bien y ahora está a la vista".