La CONMEBOL continúa firme en su lucha contra el racismo y la discriminación en el ámbito de las competencias que organiza y obviamente la final de la Copa Libertadores no será la excepción. Por eso, Alejandro Domínguez, presidente de la casa madre del fútbol sudamericano publicó un contundente mensaje de concientización en redes sociales. 

“¡Este 4 de noviembre queremos brindar a todos los hinchas una verdadera fiesta! Demostremos con cada gol, y en cada abrazo, que nuestras diferencias nos hacen únicos. El fútbol nos une, no nos divide. Luchemos contra el racismo y la violencia”, pidió el mandatario junto a un video del que participan Juan Román Riquelme, como vicepresidente del "Xeneize" y Mario Bittencourt como máxima autoridad del “Flu”.

Vale destacar que, en la edición 2022, la Unidad Disciplinaria de Conmebol emitió un nuevo fallo que fue duro desde lo económico con una multa de U$S 100.000 por actos discriminatorios de hinchas del ‘Xeneize’ en la llave ante Corinthians. En aquella ocasión, el “Timao” sacó un comunicado al respecto en el que consideró "inaceptables las manifestaciones de racismo por parte de los hinchas de Boca" y avisó que presentaría una denuncia formal en la Conmebol "para determinar responsabilidades y sanciones".

El 7 de junio pasado, hinchas del ‘Millonario’ realizaron gestos racistas contra los micros y delegación del equipo de Fluminense. Los mismos se dieron cuando jugadores y simpatizantes del equipo brasileño arribaban al Monumental. Además de ésto, hubo cánticos y ademanes racistas desde diversos puntos del estadio con epicentro en la tribuna Centenario.

Tras ese partido, Felipe Melo, figura del ‘Flu’ fue sancionado por "incitación a la violencia" por sus gestos frente a la hinchada de River. La Confederación multó al futbolista brasileño por hacer el gesto de la gallinita en el Monumental. También fueron penados el club y su DT Fernando Diniz Silva.

Por su parte, en la previa del duelo ante Olimpia, un nutrido grupo de simpatizantes del equipo 'tricolor' intentó derribar las vallas que se encontraban en uno de los accesos al Maracaná y fueron reprimidos por los efectivos de Seguridad.

En este contexto, Domínguez lideró la reunión de coordinación entre la Asociación del Fútbol Argentino, la Confederación Brasileña de Fútbol, Boca y Fluminense. “Nuestro compromiso contra la violencia y el racismo es firme e innegociable. El fútbol es una fiesta de la gente donde no tienen cabida estos actos repudiables. Defenderemos los valores positivos de este noble deporte y exhortamos a toda la familia del fútbol sudamericano estar unida en esta lucha. Estoy seguro de que viviremos una final inolvidable”, señaló el presidente del ente, quien invitó a los clubes finalistas a disputar un encuentro con respeto al rival y sin violencia.