José Pekerman le ganó un millonario juicio a la Federación Venezolana de Fútbol pese a su desprolija salida de la dirección técnica. Si bien tenía contrato hasta 2026, el ahora ex DT demandó por “violaciones en el acuerdo del término del contrato” y cobrará más de U$S 3.000.000, según informaron desde Venezuela a este sitio.

Desde la “Vinotinto” le apuntan a Pascual Lezcano, su representante y exdirector deportivo, a quien echaron por fallas éticas y de transparencia. El entrenador argentino realizó una demanda por “violaciones en el acuerdo del término del contrato”.

Si bien tenía contrato hasta el 2026, la justicia falló a su favor y la FIFA aseguró que serán U$S 1,71 millones netos más otros U$S 1,14 millones adicionales los que el ex Argentinos Juniors deberá cobrar. Su salida no se dio en los mejores términos en marzo de 2023 y lo que informó la FVF fue bastante breve pero contundente.

“La Federación Venezolana de Fútbol comunica oficialmente la finalización de la relación laboral con Pascual Lezcano y José Néstor Pekerman” inició el escrito.  Tras esto, se apuntó indirectamente al exentrenador y al ex manager Lezcano, afirmando que “Es fundamental que todos los que conforman nuestro equipo de trabajo compartan los más altos estándares de compromiso y entrega”.

X de FVF

No es la primera vez que apuntan de esta manera contra Pascual Lezcano, quien fuera futbolista de las divisiones inferiores del “Bicho” pero que nunca llegó a la Primera División. En este caso, según informó el periodista Pipe Sierra, la FVF registró irregularidades en el desempeño de Lezcano y decidió echarlo por considerar que llevó a cabo hechos poco éticos y transparentes y por cuestiones administrativas.

En el paso por Colombia ocurrió algo similar. La influencia de Lezcano en la diaria de Pekerman se dio a tal punto que estuvo en la presentación del nuevo técnico al lado del entonces presidente de la Federación, Luis Bedoya.

En ese entonces se le apuntó por citar jugadores justo antes de ser vendidos, lo que generó cuestionamientos en la opinión pública colombiana, pues la condición de Lezcano como empresario generaba un conflicto de intereses.

Aunque estos rumores nunca fueron confirmados con pruebas, esta situación generó un cortocircuito entre Pékerman, los dirigentes y la prensa “Cafetera”, parecida a la situación que se vivió en Venezuela. 

El DT de 74 años aseguró ante los medios que Lezcano era alguien en quien confiar. “Pascual está con nosotros porque es una persona de mi entera confianza y credibilidad”, dijo el técnico en aquel entonces.

Más allá de lo sucedido en Venezuela y Colombia, quienes tratan con Lezcano sostienen que mantiene un estilo confrontativo, forzando libertad de acciones de jugadores. El caso más resonante es el de Fabrizio Angileri en River (llevó al jugador al Getafe).

Aunque quizá el caso que mejor pinta el modus operandi de Lezcano es el caso Viatri-Colón, único jugador del plantel sabalero que en plena pandemia rechazó la adecuación de su contrato y que yendo mucho más allá terminó yendo a la justicia ordinaria para no sólo intimar el pago de los salarios que se le adeudaban por lógica de aquel delicado momento, sino exigiendo la libertad de acción y la liquidación de todo el vínculo tal como estaba firmado.