Hurlingham llegó a un entendimiento con Boca para que el futsal del club pase a desarrollarse en el microestadio de la intendencia. Un acuerdo que tiene algunas similitudes con el que celebraron Juan Zabaleta y River en 2018 para la promoción del fútbol en áreas formativas. El acuerdo del Xeneize es un auxilio para Jorge Amor Ameal y un importante beneficio personal para el municipio.

Según pudo averiguar Doble Amarilla, todo inició luego de una propuesta que hizo el propio intendente del partido, el dirigente de La Cámpora Damián Selci, quien ocupó el lugar de "Juanchi" Zabaleta tras su desembarco en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

El convenio que propuso Celsi es la cesión del microestadio municipal, habilitado para 3.000 personas, a cambio de $8 millones del presupuesto. Boca será el propio encargado de acondicionar el campo y de hacer cumplir con las normativas de la Liga. De acuerdo a lo que pudo saber este medio, la intención es que el Xeneize empiece a hacer de local este año.

"BIENVENIDO BOCA JUNIORS A HURLINGHAM. Noticia espectacular: el equipo de Primera de Futsal de Boca jugará de local en Hurlingham. Todos los partidos de la Liga y la Libertadores se disputarán en nuestro Microestadio. ¡Bienvenidos a su nueva casa!", manifestó Celsi en su cuenta de Twitter.

Tweet de Damián Selci

La intendencia de Hurlingham, con esto, logra que las dos principales marcas del fútbol argentino, River y Boca, estén realizando actividades en el municipio. La llegada del Millonario se dio en 2018 bajo un acuerdo que hicieron Zabaleta y Rodolfo D'Onofrio. Se trata de un predio que cuenta con 11 canchas para el desarrollo de una parte de las Divisiones Inferiores y del fútbol infantil. El municipio sostiene que, con la llegada de ambas marcas, serán un polo atractivo novedoso y que se trasladará a beneficios para el mercado interno de la zona.

La foto de Zabaleta y D'Onofrio cuando inauguraron el predio de River en 2018
La foto de Zabaleta y D'Onofrio cuando inauguraron el predio de River en 2018

"El Futsal es un deporte que está creciendo a pasos agigantados. Hoy nuestra selección nacional es la subcampeona del mundo y muchos de nuestros clubes de barrio practican Futsal. Esto da más impulso al deporte local para nuestros pibes y pibas", agregó Selci en su cuenta.

Decisión sólo política y cuestionada

La propuesta de Celsi le llegó como agua en el desierto a un Jorge Amor Ameal que hace tiempo que viene buscando acuerdos políticos, pero que no los consigue. La oferta del municipio llegó a las manos del vocal titular y presidente de Deportes Amateurs de Boca, Martin Mendiguren, uno de los pocos fieles que quedaron de la escudería de Ameal.

El femenino de futsal de Boca jugando de local en el Quinquela Martín
El femenino de futsal de Boca jugando de local en el Quinquela Martín

Actualmente, el futsal de Boca, tanto masculino como femenino, viene siendo local en el Polideportivo Quinquela Martín, ubicado en La Bombonera. A pesar de esto, Ameal decidió dar luz verde al convenio para poder establecer un acuerdo político con uno de los sectores ligados al Gobierno.

Desde el área de futsal de Boca le comentaron a Doble Amarilla que no tienen mayores precisiones del proyecto, sólo que la dirigencia le aseguró que es para "el crecimiento de la disciplina". Sin embargo, el convenio recientemente firmado no tendría ningún tipo de cambio en la vida diaria del club, a excepción de la distancia para los futbolistas. 

Puertas adentro del club la decisión no fue muy bien vista. Hoy Ameal pasa su momento político más delicado. Su frente (en comisión directiva) luce fracturado. La huída de Pergolini aceleró las fracturas internas. En los pasillos de la Bombonera cuestionan el acuerdo y dicen que no tiene ningún beneficio más que el político y personal para el presidente. "¿Sacar a Boca de su estadio para llevarlo a jugar lejos en un acuerdo político con la Cámpora? Sinceramente no se entiende", cuestionan desde el propio oficialismo. Encima aclaran que la movida no tiene relación con ninguna necesidad concreta ya que perfectamente Boca podía seguir haciendo de local en su estadio.

Incluso desde lejos se ve como una cierta imitación a un proyecto más ambicioso y funcional que estableció River en 2018. De todos modos, el municipio de Hurlingham sacó provecho de la situación y ahora se adjudica a dos grandes marcas futboleras jugando en su zona.