River perdió el primer partido de la semana, pero este no se jugó en la cancha. Afuera, en los escritorios, donde muchos le destacan sus artes a Rodolfo D'onofrio, esta vez el mandamás 'MIllonario' perdió y debió acatar. El que ganó fue Argentinos. Y el que ganó fue la Súperliga.

Ante la presión de un poderoso, la Súperliga no cedió ni un ápice y se mantuvo firme en la medida inicial: River-Argentinos se jugará el domingo en el Monumental. Es más, el organismo bajó así un mensaje claro, en el cual deja bien especificado que pretende erradicar estas costumbres de partidos "movibles".

En River, más allá que dice que no pidieron nada, lo cierto es que lo intentaron. Así lo confirmó "Doble Amarilla", en off, con varios dirigentes de la entidad de Núñez. Eso sí, también por lo bajo, señalan a un gerente como culpable de que el partido no se juege el lunes (Ver nota aparte).

Además de la firmeza de la Súperliga y las ganas de Argentinos, hubo otros factores que mantuvieron el partido en el domingo. Estos son que la Seguridad, con Guillermo Madero a la cabeza, se opuso al cambio. Y, como si todavía faltará algo más, la televisón, que no tiene a Boca el próximo domingo, ni a ninguno de los cinco primeros, necesitaba que River sea "el" partido del día. 

Así las cosas, pase lo que pase en el Monumental ante Jorge Wilstermann, River pondrá en juego la punta de la Súperliga el próximo domingo, desde las 18.05, enfrentando a Argentinos Juniors. Esta vez, el poderoso no pudo. Porotazo para la Súperliga y mensaje, claro, para el resto de los clubes.