Se esperaba un freno y una tregua en las críticas al Gobierno, pero Elisa Carrió redobló la apuesta anoche en la mesa de Mirtha Legrand. Magnética, casi fue la única oradora, dejando prácticamente sin palabras al resto de los invitados (los periodistas Viviana Canosa, Claudio Savoia y Pablo Rossi) y la misma conductora. La diputada volvió a embestir contra diversas piezas de la Coalición Cambiemos, aunque su blanco preferido volvió a ser la Justicia. 

"Garavano no existe, nunca fue ministro, la Justicia la maneja Daniel Angelici. El Presidente debe decidir si nos gobierna la mafia del fútbol o la justicia independiente”, lanzó Carrió. Inmediatamente, miró a cámara y le habló  a Macri: "No se puede estar bien con Angelici y conmigo a la vez. No se puede estar bien con la mafia del fútbol y al mismo tiempo estar bien conmigo. El Presidente debe decidir si está conmigo o con Angelici. Mauricio (Macri) lo sabía". Y remató: “en la lucha contra la corrupción, perdí la confianza en el Presidente”. Como si fuera poco, en el medio ratificó que el lunes presentará el pedido de juicio político contra Garavano.

La pelea de Carrió con Angelici viene, inclusive, desde antes que Macri sea presidente, pero en los últimos días se recrudeció porque la diputada asegura que detrás del “pacto de impunidad a los corruptos” que garantiza el ministro Garavano está nada menos que el presidente de Boca. Carrió explotó aún más cuando la semana pasada Angelici volvió a extender sus tentáculos en la Justicia y logró que uno de sus hombres, Juan Pablo Más Vélez, ganara una vacante en el Consejo de la Magistratura. El vínculo del Tano con Más Vélez es tan cercano que logró ubicarlo en el Tribunal de Apelaciones de Licencias de Superliga.

La diputada también apuntó contra Gustavo Arribas, titular de la AFI, hombre de extrema confianza del presidente Macri y eje de cuestionables transferencias de jugadores en su época de representante, labor que dicen que está retomando lentamente junto a su hijo. "La AFI (Agencia Federal de Inteligencia) está cumpliendo un rol horrible. Persigue a fiscales, da a conocer documentos secretos de la UIF (Unidad de Información Financiera), presiona en la causa de Iecsa para que no avance, que no es Mauricio, pero sí Calcaterra y Franco”, aseveró Carrió.

Pese a los dardos, insistió en su apoyo al Presidente y dijo que los mejor es que las cosas se tensen ahora y no el año que viene. “No voy a romper Cambiemos, sino que van a ver que estoy salvando Cambiemos. Estoy cumpliendo con el electorado. Prefiero que estas cosas pasen ahora. Hoy hay oportunidad de recomponer, en seis meses hay ruptura”, señaló.