Arde el “Fortín” y en Liniers se vio otro capítulo de esta serie de hechos que ponen barranca abajo al club. La marcha de socios autoconvocados de Vélez Sarsfield terminó en incidentes. La misma se realizó bajo el lema "¿Dónde está la plata? ¿Dónde está el 'Volver a ser'?"

Una buena cantidad de gente llegó a la “puerta azul” alrededor de las 19 horas de este lunes con el fin de "exigir explicaciones y pedir la renuncia de toda la CD urgente", tal como decía el texto de la convocatoria.

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Los socios autoconvocados exigieron la destitución no de uno, sino todos los integrantes de la actual gestión. En busca de explicaciones, accedieron al recinto donde suele reunirse la Comisión Directiva velezana en el segundo piso. Al no encontrar responsables comenzaron a cantar contra ellos, al grito de “que den la cara la p….”.

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El clima se fue volviendo cada vez más tenso y ante la intervención de la seguridad allí apostada, se provocaron desmanes dentro de las instalaciones del “Fortín”. Por un lado, los hinchas arrojaban vallas a los responsables de la seguridad, y la policía, según le confiaron a Doble Amarilla, reprimió con gases lacrimógenos a quienes fueron a manifestarse.

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Mientras tanto, la Comisión Directiva mantiene reuniones y conversaciones para determinar su futuro. El Presidente del "Fortín", Sergio Rapisarda, decidió tomarse licencia de la conducción del club debido a un total “desgaste” por la situación actual y lo haría oficial en las próximas horas. Su alejamiento temporal se da luego del apriete y agresiones de los barrabravas a los futbolistas y haber recibido amenazas contra su vida y la de sus familiares. 

En una cónclave mantenido en horas de la tarde que derivó en su salida, le pidió a Diego González, vicepresidente primero, que siga el mismo camino para descomprimir la situación y está en evaluación. En caso que su par, con quien mantiene serias diferencias, opte por continuar, podría provocar una serie de renuncias masivas en la Comisión Directiva que dejaría al club al borde del llamado anticipado a elecciones. El futuro del club de Liniers es toda una incógnita.