La Federación de Fútbol de Dinamarca difundió un nuevo comunicado cuestionando a los organizadores del Mundial de Qatar 2022 por presuntas violaciones a los derechos humanos y laborales de los trabajadores.

Jakob Jensen, director y CEO de la federación, afirmó que "la DBU ha sido durante mucho tiempo muy crítica con la Copa del Mundo en Qatar, pero ahora estamos intensificando aún más nuestros esfuerzos y diálogo crítico para aprovechar el hecho de que estamos clasificados para trabajar por más cambios en el país".

"Además, desde hace mucho tiempo hemos llamado la atención sobre los desafíos a los que se enfrentan la FIFA y Qatar y continuaremos haciéndolo", manifestó el directivo danés.

Dinamarca publicó una serie de planteos de cara al Mundial para protestar por las condiciones laborales de los obreros que trabajan en la finalización de los modernos estadios.

"Los socios comerciales de la selección masculina no participan ni realizan actividades en Qatar, a menos que las iniciativas sean activistas y formen parte del diálogo crítico", dice el primer punto.

La ropa de entrenamiento de la selección danesa no lucirá ninguna publicidad durante todo lo que dure su participación en la Copa del Mundo. La DBU también informó que minimizará en gran medida su propia actividad de viajes a Qatar y sólo participará en eventos que estén relacionados con el deporte.

En uno de los últimos puntos de las iniciativas, se anunció que realizarán una investigación antes de elegir el hotel donde concentrará el seleccionado de Dinamarca, con el fin de que en ese alojamiento se cumpla con las leyes laborales. 

El comunicado de la Federación viene a colación de una investigación que publicó el medio inglés The Guardian, que asegura que desde el inicio de las obras mundialistas ya murieron, por lo menos, 6.750 trabajadores inmigrantes. La mayoría de los obreros eran provenientes de India, Nepal, Bangladesh, Pakistán y Sri Lanka.