A comienzos de mes, Dani Alves fue sometido a un juicio oral que se desarrolló en tres audiencias en los Tribunales de Barcelona para determinar si cometió una agresión sexual contra una joven de entonces 23 años en la discoteca Sutton a fines de 2022. 

Durante el proceso, la supuesta víctima ratificó su denuncia y además declararon como testigos su ex mujer y otros familiares. Lo cierto es que por el mencionado delito, Alves se expone a una condena de entre de 9 y 12 años de prisión.

Tras el regreso de Alves al complejo penintenciario donde se encuentra detenido, uno de sus compañeros declaró en un programa televisivo: A raíz del juicio le ha pegado el bajón. Como deprimido, cabizbajo. Los educadores y funcionarios como arropándolo. Por miedo de que (...) intentara hacer alguna locura o historias de esas. Estuvo con ese protocolo al día siguiente del juicio”, 

Dicha medida contempla acciones que se centran en la prevención, detección e intervención del riesgo de que atente contra él mismo. Por ello, se ha implementado un programa vigilancia continua y restricciones de movilidad, además de programas de apoyo como terapias y actividades.

Esta mañana, Joana Sanz, la esposa de Alves publicó una emotiva carta escrita de su puño y letra que ha visto ahora la luz y en la que el brasileño le declara su amor: Rezo todos los días para poder volver a verte despertar. La nostalgia es no poder hacerlo ahora, se podía leer.

Tras ello, la mujerpublicó otras stories en su perfil de Instagram confesando que se había tratado de un error de publicación: Publiqué por error para todo el mundo algo que era para mejores amigos. Tremenda velocidad la de los medios de comunicación, ¿tenéis activado un seguimiento de mi Instagram con notificaciones o algo? Si todo el mundo viera lo que yo subo para el grupo de mejores amigos... voy a dejar de subir cosas, no vaya a ser...”.