El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro de Portugal, Antonio Costa, celebraron este miércoles la candidatura conjunta entre ambos países y Marruecos para ser los anfitriones del Mundial de 2030, una candidatura que, a su juicio, es ahora más fuerte.

Sánchez confió en que la suma de Marruecos a la candidatura mejora las condiciones “para ganar esa carrera” por la Copa del Mundo de 2030 y añadió: que esta decisión lanza un “muy buen mensaje” de colaboración entre las dos orillas del Mediterráneo, entre Europa y África.

En la misma línea, Costa subrayó que la candidatura conjunta de la Península Ibérica con Marruecos difunde un mensaje “muy positivo” de que dos continentes vecinos “que no son distantes y que no se quiere separar” desean trabajar unidos en un objetivo común. “Esto no puede más que ayudar a unir lo que nada puede separar”, cerró. 

La candidatura de España y Portugal para ser sede del Mundial de 2030 sumó un nuevo tercer integrante con Marruecos y lo anunció el propio país africano durante la reunión del Consejo de la FIFA en la capital de Ruanda: Kigali.

El Rey Mohamed VI de Marruecos realizó el anuncio a través de un discurso leído durante la reunión del Consejo FIFA por Chakib Benmoussa, ministro de Educación y Deportes de aquel país africano, y que se produce apenas una semana después de la baja de Ucrania del proyecto 2030 que hasta hoy era íntegramente europeo.

Mohammed VI destacó en su mensaje que “esta candidatura conjunta, que no tiene precedentes en la historia del fútbol, unirá a África y Europa, el norte y el sur del Mediterráneo y los mundos africano, árabe y euromediterráneo”, poniendo fin a negociaciones que se habían iniciado durante el Mundial de Qatar y que se habían intensificado en las últimas dos semanas.