Lejos parece haber quedado la alegría por el Scudetto conseguido en la temporada pasada en Napoli. La salida de Luciano Spalletti fue el primer golpe del flamante campeón que no encuentra el rumbo con Walter Mazzarri y deambula por la mitad de la tabla en este 2024.

En Italia aseguran que, lo único que sostiene a Mazzarri en su cargo es la cercanía del partido de ida de los octavos de final de la Champions League. “El Barcelona salva a Mazzarri: no hay despido en víspera”, es el diagnosticó del periódico 'Il Mattino' a apenas tres días de recibir al conjunto culé en el Stadio Diego Armando Maradona. 

"Nos está yendo todo mal", admitió Mazzarri, que se aferró al retorno del delantero nigeriano Victor Osimhen, máximo goleador de la Serie A la temporada pasada con 26 tantos. El DT sabe que del africano dependen buena parte de las ilusiones de eliminar al Barça. "Ahora recuperemos a Osimhen, que lo he tenido muy poco...", imploró.

Lo cierto es que, en medio de este clima de incertidumbre y falta de resultados deportivos, De Laurentiis y compañía ya entablaron conversaciones con Francesco Calzona, actual seleccionador de Eslovaquia. El hombre en cuestión tiene 55 años y fue ayudante de campo de con Maurizio Sarri Luciano Spalletti