(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Girona y Atlético de Madrid dirimen una de las eliminatorias de octavos de final más interesantes de la Copa del Rey. En otro momento y con otras circunstancias, muchos verían al Atlético como el claro favorito. Pero claro, hablamos de un Girona que en apenas una temporada y media en la elite del fútbol español, ha demostrado ser uno de los rivales más duros posibles. El cuadro catalán es de los equipos que nadie quiere encontrarse, especialmente en el caso de un Atlético de Madrid que no pudo conseguir la victoria en los últimos tres encuentros que disputaron entre sí.

En los tres, el último hace unas semanas, empate. El equipo de Simeone no pudo con el Girona en ninguna de sus dos visitas a Montilivi ni tampoco en el Wanda Metropolitano. Al conocer el nombre del rival para esta ronda, los rojiblancos torcieron el gesto porque esta eliminatoria es la típica en la que hay poco que ganar y mucho que perder. El objetivo es llegar al Wanda Metropolitano con el mejor resultado posible. Es cierto que el equipo del Cholo llega a la cita en una racha de 14 partidos sin perder (no cae desde el pasado 24 de octubre en Champions), pero también lo es que los precedentes no invitan al optimismo.