Juan Román Riquelme y su hijo Agustín se negaron a declarar ante la Fiscalía Especializada en Eventos Masivos de la Ciudad en la causa que investiga al ex crack de Boca por fallos en la organización del Clásico y a su hijo por haber violado la cuarentena.

Celsa Ramírez, fiscal en lo Penal, Contravencional y de Faltas de CABA tomó la audiencia indagatoria virtual de este miércoles a ambos involucrados. Si bien estuvieron presentes, se negaron a declarar. Según pudo saber este medio, continuarán analizando pruebas y, en caso de no encontrar una solución alternativa, se requerirá juicio.

Riquelme está acusado por “omitir recaudos durante un evento masivo”. Podría ser sancionado con el pago de una multa de $ 100.000, la imposibilidad de asistir a un estadio entre dos y seis meses, o un arresto de sesenta días. La normativa también prevé clausura del establecimiento e inhabilitación para obtener habilitación o licencia para organizar o promover eventos por el plazo máximo establecido por la ley.

Agustín Riquelme, por su parte, está acusado de violar el artículo 205 del Código Penal y podría recibir una pena de prisión de seis meses a dos años.  El joven volvió de un viaje de egresados desde Cancún el día anterior al partido. En el vuelo se registraron 44 casos positivos, por lo que debía realizar una cuarentena obligatoria. Sin embargo, asistió al estadio. JRR es inculpado de autorizar el ingreso de su hijo a la Bombonera.

Doble Amarilla fue el primer medio en dar cuenta de la presencia de Agustín Riquelme en la Bombonera en el clásico ante River luego de pertenecer al contingente de egresados que regresó desde Cancún.