(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) La Federación de Tenis de Estados Unidos (USTA) avisó a los jugadores y jugadoras que competirán en el próximo US Open que eludirá cualquier responsabilidad sobre posibles contagios e incluso muertes por coronavirus durante el torneo.

Es más, los organizadores del Grand Slam harán firmar a los tenistas un documento en el que dejarán explícito que deberán asumir los riesgos de contagios e incluso de muertes por Covid-19 mientras se desarrolla el torneo y permanecen en suelo norteamericano.

Por lo pronto, la ATP como la WTA han negociado un seguro para los participantes del torneo, que se jugará entre el 31 de agosto y el 13 de septiembre. Este documento elaborado por la USTA fue filtrado en redes sociales por el tenista holandés Wesley Koolhof, 17 del mundo.

"Yo asumo voluntariamente la responsabilidad total sobre cualquier riesgo, incluyendo la muerte, que pueda suceder conmigo u otras personas que entren en contacto conmigo, como resultado de mi presencia en las instalaciones, ya sea por negligencia del NTC (National Tennis Center) o de otro modo", dice la nota de la USTA en el párrafo más importante.

El documento que deben firmar los tenistas dice también: "Estoy de acuerdo en que todas las controversias y reclamaciones que surjan de o en relación con esta renuncia o mi presencia en las instalaciones durante la pandemia de Covid-19 deben ser perseguidas de manera individual solamente. Al firmar este documento, renuncio a mi derecho a iniciar, o ser parte de, cualquier acción o reclamación colectiva".

El US Open ya tiene bajas importantes como las del español Rafael Nadal, número dos del mundo, el suizo Roger Federer (4), por lesión, la del australiano Nick Kyrgios (40), y la más reciente, la del suizo Stan Wawrinka (17). En el cuadro femenino faltarán la australiana Ashleigh Barty, número uno del mundo, la ucraniana Elina Svitolina (5) y la holandesa Kiki Bertens (7).

Al mismo tiempo, el Gobierno italiano autorizó excepciones de realizar la cuarentena a los tenistas que vengan de Estados Unidos a disputar el Masters 1000 de Roma, teniendo en cuenta que luego del US Open, el Masters 1000 en la capital italiana es el siguiente torneo en el calendario.

El artículo 1 del decreto firmado por el Primer Ministro italiano, Giuseppe Conte, reza que "todo deportista que llegue a Italia procedente de otros países podrá competir sin necesidad de realizar cuarentena previa de 14 días". La norma garantiza que todos aquellos que participen del US Open podrán jugar también en Roma. El único requisito es que den negativo en el test de Covid-19, pasadas 48 horas desde su aterrizaje en suelo italiano. 

De no haber existido esta autorización, los tenistas que hubieran jugado el US Open deberían haber realizado cuarentena al pisar suelo italiano o, directamente, hubiesen declinado participar del torneo.