Michael Jordan se retiró hace veinte años de la actividad profesional, abandonando los campos de juego en 2003 tras un breve paso por los Washington Wizards. Sin embargo, aún siendo jugador, el estadounidense comenzó a amasar una fortuna que hoy lo convierte en historia. 

“Air” se convirtió este mes en el primer deportista en ingresar a “Forbes 400” un selecto grupo de personas integrado por las personas más ricas de los Estados Unidos. Jordan consiguió ingresar a este listado, luego de que se aprobara en agosto pasado la venta de los Charlotte Hornets, de los cuales era accionista mayoritaria, en US$ 3000 millones a un grupo empresario. 

El legado financiero de MJ se forjó a través de acuerdos con marcas de renombre, incluyendo McDonald’s, Gatorade, Hanes y, por supuesto, Nike (con el modelo de zapatillas Air Jordan), por los que sus regalías anuales ascendieron a unos impresionantes 260 millones de dólares en su última medición, según una publicación de la prestigiosa revista Forbes, dedicada a la información vinculada al mundo de los negocios y las inversiones.

La estrella de los Bulls fue también el pionero entre los atletas de élite en convertirse en multimillonario en 2014, otras celebridades como LeBron James y Tiger Woods alcanzaron ese estatus combinando excelentes resultados deportivos con jugosos contratos comerciales.

El empresario y dueño de los Washington Wizards, Ted Leonsis, remarcó en Forbes que la próxima meta fuerte de Michael estaría en el NASCAR, la categoría de autos en la que el ex basquetbolista invirtió en 2020 como cofundador del equipo 23XI Racing de la Cup Series. “Apuesto a que será un gran negocio para él. Es competitivo y tiene deseo de ganar”, afirmó.