La conmoción continúa, tras el suicidio de Williams Tapón, el agresor del árbitro de Sarandí. Tras la denuncia del referí Cristian Ariel Paniagua contra los golpeadores de aquella noche, en la Comisaría n°4 de Avellaneda, el principal agresor se quitó la vida en la vía pública.

Durante la mañana de este martes, el hermano de Tapón acusó al árbitro de ‘extorsión’ y apuntó contra los periodistas por lo sucedido: “En todos los partidos amateur hay un William que provocan ustedes”, dijo.

Por eso, horas más tarde el que habló fue Mariano Zitto, fiscal de la causa: "La primera calificación era 'lesiones graves', y analizando las declaraciones y con el video como prueba decidimos ampliar la carátula. Habíamos pedido la orden de detención pero me informaron, pasadas las 22hs, que este muchacho se había quitado la vida".

Ante el antecedente más inmediato como el del recordado Fernando Báez Sosa, asesinado por rugbiers en un boliche de Villa Gessell, expresó: "Las reacciones desmedidas generan situaciones indeseadas, no solo por lo sucedido en el partido sino por el desenlace para una persona de 24 años: me sorprendió la noticia de su muerte", aunque agregó: "la sensibilidad de la sociedad está a flor de piel por el caso Báez Sosa", explicó en Extra TV.

Además, habló de las declaraciones de la familia a los medios del fallecido en relación a una posible extorsión tras el hecho: "El hecho es uno solo y el autor terminó de la peor forma. Jurídicamente el caso está cerrado. En caso que la familia sospeche del damnificado quieran puntualizar sobre algo posterior, va a ser parte de otra investigación y que es ajena a mi Fiscalía. Tengo entendido que denunciarán pero aún no lo hicieron".

Para cerrar, se expresó sobre los antecedentes penales de Tapon: "En este momento no tiene sentido opinar o informar sobre eso por cómo termina esta historia. Él pidió disculpas y reconoció el hecho. Pero se sobredimensionó informativamente todo desde las redes sociales".