A un año de la muerte de Diego Armando Maradona, es imposible hacer caso omiso a cómo su presencia adentro y afuera de la cancha cambió la historia de varios clubes. Desde Villa Fiorito hasta Dubai, desde La Paternal a Sinaloa, desde Rosario a Sevilla, desde La Paternal a Barcelona, de La Plata a Barcelona. Un camino por el recorrido deportivo y personal a lo largo de su vida, marcada a fuego por una pelota bajo la suela. 

Tal vez sea para los futboleros el día más triste del año. Muchos se repiten hasta el cansancio: '¿Cómo se va a morir el Diego? Si era el mejor, era inmortal'. Muchos homenajes los pudo disfrutar adentro de una cancha de fútbol mientras era el DT de Gimnasia de La Plata y todo el fútbol argentino caía rendido a sus pies.

Gimnasia de La Plata, su última batalla

El 5 de septiembre de 2019, se confirmaba la noticia: Maradona volvía al fútbol argentino para ser el DT de Gimnasia. Diego se hacía cargo del Lobo de La Plata, que peleaba mano a mano con la tabla del descenso para no caer de categoría. Poco le importó al hincha tripero, que llenó el Juan Carmelo Zerillo solo para recibirlo tres días más tarde. 

Gambeta, carácter, magia y legado: los clubes donde el 10 dejó su huella

Hasta el arribo de Diego, el plantel tripero había disputado cinco partidos en la Superliga 2019-2020, con el Indio Ortiz como entrenador, y había obtenido tan solo un punto de los 15 disputados.

El comienzo del ciclo no fue fácil. El Racing de Coudet en el Bosque, Talleres en Córdoba y River en 60 y 118 generaron preocupación, ya que el Lobo no pudo obtener ningún punto. Recién un mes después de su arribo como entrenador, Diego y Gimnasia tuvieron su primer festejo en la victoria 4-2 ante Godoy Cruz en Mendoza. El propio DT sentenciaba: "La mitad más uno de La Plata están contenta" 

En total, el Lobo disputó 20 partidos bajo la conducción técnica del Diez: 18 de ellos por Superliga, 1 por Copa Superliga y también 1 por Copa Argentina. El balance general fue de 7 victorias, 5 empates y 8 derrotas, con una efectividad del 43,33%. 

Fue en marzo del 2020 cuando Diego sincero y algo enojado ante el avance del COVID-19 y la continuidad del fútbol argentino, decía: "Yo estoy sanísimo, pero para mí el fútbol se tiene que cortar".

Sinaloa, tierra de cárteles y de Diego

Un año antes de su llegada a La Plata, Maradona sellaba su arribo a Dorados de Sinaloa, un club histórico del fútbol mexicano, donde Pep Guardiola había despuntado sus últimos años como futbolista en una ciudad marcada por el negocio del narcotráfico. Hacia allá iba Diego en una nueva aventura como DT, buscando ascender al equipo pez a la Primera División.

¿Quién iba a lograr que los futboleros pasaran noches en vela, de madrugada, viendo a un equipo del ascenso mexicano? Solo él. La MaradonaCam se hacía famosa, solo por seguir todos los movimientos de Diego a la vera de la cancha y en el banco de suplentes. A nadie le interesaba mucho el resultado: lo importante era el 10.

Gambeta, carácter, magia y legado: los clubes donde el 10 dejó su huella

Lo cierto es que Maradona estuvo al frente del equipo de Culiacán 35 partidos, llegó a la final por el ascenso y renunció aquejado por sus dolores en la rodilla. "Juntos sorprendimos al mundo. Demostramos que el fútbol es pasión y corazón. Con el Diego de Sinaloa, #LaHicimosDeDiez. ¡Gracias por todo, Jefe! ¡Recupérate y nos vemos pronto!", rezaba el tweet de despedida de Dorados el 13 de junio de 2019.

Emiratos Árabes, a los pies del 10

Luego de su estadía al frente de la Selección, el Diez era convocado nuevamente para ser entrenador por el Al Wasl, uno de los equipos más reconocidos de Medio Oriente. Maradona fue recibido con todos los honores en el aeropuerto como la gran estrella que era. Redebutó como entrenador el 28 de agosto del 2011, cayendo agónicamente frente a Al Jazira por 4-3.

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El mediocampista creativo Mariano Donda llegó desde Godoy Cruz, el chileno Edson Puch desde Universidad de Chile y los uruguayos Juan Manuel Olivera de Peñarol y Richard Porta de Nacional para reforzar el equipo.

Las redes sociales comenzaban la era de la masividad y nos permitían conocer detalles del lejano oriente a cargo de Diego, una vida lujosa llena de excentricidades que se terminó cuando los dirigentes del club de Dubai decidieron despedirlo en junio del 2012, porque los resultados no acompañaban.

Diego Maradona runs training session with Fujairah FC

Recién cinco años más tarde, Diego volvería a tener otra chance como DT, en este caso en Al Fujairah de la Segunda División de los Emiratos Árabes. Tas no conseguir el ascenso directo a la Primera División, dejó de ser técnico del equipo, que, para colmo, finalmente conseguiría el ascenso en un repechaje sin él en el cargo. 

Diego nunca abandonó Dubai desde su llegada en 2011 y siempre vivió en la misma casa. La misma fue puesta en alquiler en enero de este año, tras el fallecimiento del 10.

Sus inicios como DT 

El 25 de junio de 1994 fue otro momento en la vida de Diego que quedaría marcado en la retina de los maradonianos. El 10 del seleccionado argentino abandonaba el campo de juego en pleno Mundial de la mano de una "enfermera", mientras Argentina derrotaba 2-1 a Nigeria. El control antidoping posterior daría positivo y Maradona sufriría una suspensión de 15 meses para jugar al fútbol. Esa sanción no le impedía ser entrenador, por lo que el astro se movió rápidamente para seguir ligado al fútbol. 

Poco menos de cuatro meses después de aquella icónica imagen en Boston, Maradona se hacía cargo de Deportivo Textil Mandiyú de Corrientes junto a Carlos Fren. El debut fue con derrota 2-1 frente a Rosario Central, pero con Diego viéndolo desde la platea porque no tenía autorización para ser DT. 

Dos meses más tarde, la dupla abandonaría el cargo peleado con la dirigencia del equipo correntino tras 12 partidos en los que solo consiguió una victoria. Exactamente un mes después, en enero de 1995, asumiría al frente de Racing, donde la campaña también fue corta, ya que duró solo 4 meses. Dirigió 11 partidos, en los que consiguió 2 triunfos, 6 empates y 3 derrotas.

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De Villa Fiorito al mundo, con la gambeta como estandarte 

Diego Armando Maradona inició su carrera deportiva de manera amateur. Aunque pocos conozcan la historia, el 10 defendió la camiseta de Estrella Roja. Si, Estrella Roja de Villa Fiorito, donde comenzó a jugar, a convertir goles y a festejar triunfos en un fútbol de potrero y por fuera de las ligas barriales, según dio cuenta el periodista Andrés Burgo en el libro 'Último Maradona'.

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Este es el comienzo de una historia marcada por gambetas, goles y magia adentro del campo de juego, mientras jugaba con sus vecinos en Estrella Roja. Maradona realizó su primera prueba en 1969 en las inferiores de Argentinos Juniors, más conocidas como "Los Cebollitas", nombre que debieron adoptar los famosos 'Juegos Nacionales Evita' en el año 1973 ya que no se permitía competir bajo la denominación de Argentinos Juniors. Allí Diego deslumbró junto a su vecino 'Goyo' Carrizo y varios más, llegando a un invicto de 136 partidos.

El debut como profesional 

Con la 16 en la espalda reemplazando a Rubén Giacobetti en el entretiempo, Diego debutó de manera profesional en Argentinos Juniors el 20 de octubre de 1976, a diez días de cumplir los 16 años de edad, en un partido del Campeonato Nacional, frente a Talleres, uno de los mejores equipos del país en ese momento. Juan Carlos Montes, el DT de Argentinos Juniors fue claro, "Entrá y hace un caño" Diego cumplió en la primera jugada de la segunda parte. 

En la temporada 1977, Maradona jugó 49 partidos y anotando 19 goles y llamó la atención de varios clubes grandes de América y por supuesto de Europa. Diego ya era una figura del fútbol argentino pero se quedaba afuera de la convocatoria para el mundial cuando la Selección era comandada por Menotti.

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Tras aquella decisión, Diego arrabalero y canchero como siempre jugaba un partido espectacular contra Chacarita hacía dos goles y en el vestuario declaraba "Lo de hoy no es una revancha para mí. De ninguna manera. El señor Menotti creyó que yo era el cuarto 10 y me tuve que ir. Yo respeto su posición porque él es el técnico, pero eso no quiere decir que la comparta. Cuando me comunicaron que quedaba desafectado me dolió muchísimo. ¿Explicaciones? No, no me las dieron de ningún tipo. Tampoco las precisaba. Valencia es el mejor 10 y debe jugar, sin desmerecer a Alonso ni a Villa. Pero es el que tiene más visión de conjunto".

Para el año '79, Maradona era la figura del fútbol argentino se alzaba con el Mundial Sub 20 disputado en Japón con la Selección Argentina y a su vuelta se convertía por segundo año consecutivo en el goleador del campeonato, un récord que agigantaría al año cuando se convierte en el único jugador en la historia de la Primera División de Argentina en ser el máximo goleador del torneo en cinco ocasiones seguidas. Argentinos fue escolta de River en el el Metropolitano de aquel año. El 14 de septiembre, Maradona anotó su gol número 100 profesional a San Lorenzo. Un mes más tarde, Diego volvía a los primeros planos cuando le marcaba cuatro goles a Boca, el partido terminó 5 a 3, más precisamente a Hugo Orlando Gatti, que había ninguneado al 10 días antes. 

Boca, su amor eterno 

Maradona, tuvo dos pasos por el "Xeneize" en el florecer y en el ocaso de su carrera futbolística y sembró en todos los 'Bosteros' un amor que durará toda la vida. Incluso fue el mismo Diego, el que confesó: "Cuando me muera quiero que me entierren con la camiseta de Boca, yo soy bostero y moriré bostero" . 

El 20 de Febrero de 1981, firmó su contrato con Boca, tras coquetear e incluso estar a punto de firmar con River, el vigente campeón y el equipo con mayor presupuesto de nuestro fútbol. Diego debutó dos días después y le marcó dos goles a Talleres en la victoria 4 a 1. El 10 de Abril jugó su primer superclásico contra River con victoria por 3 a 0 con dos de Brindisi y uno de él. 

El 9 de agosto, una fecha antes del final del Metropolitano de 1981, Boca tenía la posibilidad de consagrarse campeón si conseguía un empate frente a Rosario Central, en Rosario. Sin embargo, el partido, en el que Maradona erró un penal, terminó con un triunfo de los rosarinos por 1-0. La revancha sería una semana después frente a Racing Club de local, encuentro que terminó 1 a 1 y le brindó su único título conseguido en el fútbol argentino.

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14 años más tarde, llegaría la segunda oportunidad de Maradona con la camiseta de Boca, el 30 de Septiembre de 1994 y tras arduas negociaciones con la dirigencia del equipo de la ribera. El 10 debutaba en un amistoso frente a la Selección de Corea del Sur con victoria 2 a 1. El Apertura 1995 terminó de manera discreta y para colmo con una nueva comisión directiva encabezada por Mauricio Macri, Boca contrataba a Carlos Bilardo que mantenía una tensa relación con Diego tras su convivencia en Sevilla. Tras dos campeonatos repleto de sinsabores, cinco penales errados de manera consecutiva, el fantasma de la suspensión acechando, Diego se alejaba de los campos de juego. 

Casi un año después, previo paso por Suiza, Diego volvía a firmar con Boca, pero cuatro meses después volvería a ser suspendido por un doping positivo. Tras varios idas y vueltas con la justicia y la AFA, el 25 de octubre de 1997, Boca derrotó como visitante a River  por 2-1, y Diego fue reemplazado en el entretiempo por Juan Román Riquelme. Ese sería además su último partido oficial, ya que anunció su retiro del fútbol profesional el mismo día de su cumpleaños número 37, el 30 de octubre

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Barcelona, una catarata de malas decisiones

Tras consagrarse con Boca en el Metropolitano de 1981 y la disputa del Mundial 1982, Diego fichaba para el equipo blaugrana. El primer partido oficial fue el 4 de septiembre de 1982, donde, pese a que convirtió un tanto, su equipo cayó con Valencia por 2 a 1. Tras haber disputado 13 partidos de la Liga y marcado 6 goles, se le detectó una hepatitis, que lo mantuvo alejado del campo de juego por tres meses. La relación con el entrenador alemán Udo Lattek nunca fue buena y en su reemplazo llegó un viejo conocido César Luis Menotti. La temporada 1982/83 terminaba con dos títulos para el Barca de Diego. 

La temporada 83/84 directamente fue para el olvido. El 24 de septiembre de 1983 se enfrentaron en el Camp Nou el Barcelona y el Athletic Club, en el partido correspondiente a la cuarta fecha de la Liga, fue victoria para el equipo catalán 4 a 0 pero la noticia no era esa. Maradona fue retirado en camilla lesionado y con el tobillo de la pierna izquierda roto (fractura del maléolo externo y del ligamento) después de una dura entrada de Andoni Goikoetxea.

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El 5 de mayo de 1984, se volvieron a enfrentar Barcelona, campeón de la Copa del Rey y Athletic Club, el vigente campeón de Liga. El partido fue el reencuentro entre Maradona y Goikoetxea, el jugador con el cual tuvo el choque que le provocó la lesión.

La final estuvo rodeada de una gran tensión, tanto en los días anteriores del encuentro, con cruce de insultos, como durante el encuentro. Al final, ganó el Athletic por 1-0, pero lo peor llegó al término del encuentro. Cuando el árbitro pitó el final del partido, Maradona agredió al jugador del Athletic Miguel Ángel Sola.

Los jugadores de ambos equipos se trenzaron en una batalla campal, ante los ojos de todos los espectadores y de las principales autoridades españolas que estaban en el palco.​ Tras el escándalo originado varios jugadores fueron fuertemente sancionados: la Federación Española de Fútbol impuso a Maradona una sanción de tres meses sin poder jugar en las competiciones españolas. Fue la última imagen de Diego en Barcelona. 

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Napoli, su lugar en el mundo 

Tras la traumática salida de Barcelona, el 29 de junio de 1984, se confirmó el pase de Maradona al Nápoles por 1.3 millones de pesetas, algo así como 8 millones de euros y cuatro años de contrato. el 5 de julio de 1984, ante un Stadio San Paolo que contó con la asistencia de 80 mil hinchas del Napoli, Diego era el protagonista de una de las presentaciones más grandes de la historia. 

El mundial de México 1986, puso a Maradona en la cima del fútbol mundial, al volver de la cita mundialista Napoli con Diego a la cabeza obtuvo la Copa Italia y el Scudetto, poniendo al club en la vitrina de los grandes equipos. 

En la temporada 1989, con un plantel plagado de estrellas comandadas por Diego, Napoli se quedó con la Copa UEFA venciendo al Stuttgart alemán 

Maradona, calentamiento: Lección de fútbol y baile / Opus - Live is Life

Antes de viajar al Mundial de Italia 1990, Diego obtenía el segundo Scudetto, con el conjunto napolitano y a la vuelta obtendría la Supercopa de Italia goleando a Juventus 5 a 1. Sin embargo, el año 1991, empezaría de muy mala manera ya que el 17 de marzo de 1991, por la fecha 25º, el Nápoles le ganó por 1-0 al AS Bari con gol de Gianfranco Zola.

Tras el partido, Maradona fue elegido para el control antidopaje, que finalmente daría positivo por cocaína. La Federación italiana le impuso una sanción que lo alejaría de los estadios durante quince meses, y Maradona y el club apelaron ante el Comité, llegando a decir que era un venganza por lo que los antecedentes que habían ocurrido en el Mundial del año pasado

En su regreso, Diego ya no era el mismo

Después de varias idas y vueltas, tras dejar atrás la suspensión Maradona firmó con Sevilla en Septiembre de 1992, tras la insistencia de Carlos Salvador Bilardo un viejo amigo, al que era imposible decirle que no. Debutó oficialmente con el conjunto sevillano el 4 de octubre de 1992, en partido correspondiente a la quinta fecha de Liga. Curiosamente, el rival del Sevilla fue el Athletic Club, el mismo club ante el que había jugado su último partido en el fútbol español ocho años antes.

Diego empezaría a tener problemas con los directivos debido a sus constantes salidas nocturnas y faltas a entrenamientos. Esto provocó que el club acabe contratando un detective, quien seguía sus actividades. Durante el entretiempo del partido frente al Real Burgos el 13 de junio de 1993, Maradona pidió el cambio debido a la lesión que arrastraba en su rodilla, pero Bilardo le pidió que continuara, por lo que el médico del plantel le aplicó tres inyecciones de un anti-inflamatorio.

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Sin embargo, a los 53 minutos Bilardo decide reemplazarlo por Pineda, provocando la ira del jugador que insultó públicamente al entrenador. Este episodio terminó de romper las relaciones entre Maradona y la dirigencia. En total fueron 29 partidos, 6 goles y 9 asistencias. El Sevilla acabó La Liga en séptima posición con 43 puntos, a 15 del campeón Barcelona.

Newell's, un amor de verano en plena primavera

Tras coquetear con Argentinos Juniors y San Lorenzo, Diego volvía al fútbol argentino para vestir la camiseta de Newell's. El 13 de septiembre de 1993 realizó su primer entrenamiento ante la presencia de 40 mil personas.  El 7 de octubre de 1993 se realizó un partido amistoso de celebración por el debut de Maradona con la camiseta de Newell's, frente a Emelec de Ecuador.

Gambeta, carácter, magia y legado: los clubes donde el 10 dejó su huella

Su debut oficial se produjo el 10 de octubre, perdiendo 3 a 1 contra Independiente de visitante. Maradona jugaría además los partidos contra Belgrano, Gimnasia y Esgrima La Plata, Boca Juniors y Huracán.