Dos estadios de Mendoza se encuentran en obras para afrontar la temporada 2024 de la mejor manera y trabajan a contrarreloj para poder llegar de la mejor manera a la primera fecha de la Copa de la Liga: el Malvinas Argentinas y el Bautista Gargantini.

El Malvinas Argentinas, que habitualmente es la casa de Godoy Cruz, se encuentra en etapa de refacción y las obras no finalizarán antes del debut en la Copa LPF ante Defensa y Justicia a fines de enero.

"En este momento estamos en el proceso de armar todo de nuevo. No hay tiempo de resembrar como hacemos habitualmente dos veces al año. Estaba tan dañado que sembrando y empezando de cero se demora 60 días para pisar de nuevo el campo de juego", señaló Federico Chiapetta, Subsecretario de Deportes de Mendoza, sobre el estadio que fue sede del Mundial Sub-20 el año pasado.

Con este panorama, el conjunto 'Bodeguero' deberá buscar otro estadio para oficiar de local: según pudo saber Doble Amarilla, tendría todo acordado con Gimnasia de Mendoza para jugar en el Víctor Legrotaglie.

Por otro lado, el Bautista Gargantini de Independiente Rivadavia también está en etapa de renovación para el equipo recientemente ascendido a la máxima categoría del fútbol argentino. Entre las obras que se realizan se encuentran la renovación del vestuario visitante, reacondicionamiento del palco de prensa y resembrado del campo de juego.

En el club son optimistas con la finalización de los trabajos y creen que van a llegar con lo justo para recibir a Independiente en el debut por Copa LPF. De todas maneras, analizan un plan B: en caso de que se retrasen, Independiente Rivadavia jugaría en San Juan y, si Seguridad lo permite, podría jugar con hinchas visitantes.