En el Monumental, River y el Decano se enfrentan por la fecha 12 de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol. 

En medio del complemento, Gallardo le pidió a Herrera que no pique y el defensor no hizo caso. Esto generó una mala respuesta del DT, quien le tiró un manotazo a la pasada.

Este correctivo fue una actitud inusual en el entrenador para con un futbolista, que no reaccionó ante lo ocurrido y siguió concentrado en la jugada. "Es una cuestión de vivir el partido así. Ya sabía que iba a picar y se iba a ir, estaba cantado, la veía venir... desde afuera es muy fácil pero son ellos los que tienen que resolver situaciones adentro", confesó el entrenador en conferencia de prensa.

Y completó sobre su reacción: "A veces con la vorágine del partido uno se quiere anticipar y cuando las cosas pasan a uno le da bronca, pero cómo le voy a dar un correctivo a Herrera? Fue una caricia en la espalda. Me agarré con el pobre Herrera que es más bueno...".