Sentado a la derecha de Mariano Elizondo el Vicepresidente de la Superliga presente en la asunción del primer CEO que manejará los destinos del torneo de Primera División de nuestro país, explicó de que consta el Convenio de Coordinación entre la Superliga y la AFA: “Hay dos partes. Lo deportivo y lo económico. Queda claro que la AFA va a seguir siendo la federación argentina y que algunos puntos, como por ejemplos los derechos federativos de los jugadores va a seguir pasando por la AFA. Todos los derechos económicos y la organización del campeonato, van a correr por la Superliga”.

Exceptuando los puntos lógicos (que fue a lo primero que se refirió Brito), hay otras cuestiones que están dentro de ese Convenio. “Seguramente al regreso del Presidente de AFA del viaje, que entiendo es el viernes de la semana que viene tendremos la primera reunión”, dijo el vicepresidente de River. 

Uno de los principales puntos fuertes en el proyecto de la Superliga es el ítem “premios y castigos” sobre todo a quienes tengan deudas. 

“Sabemos que venimos de un sistema muy dinámico, con muchos favores políticos entre la Asociación y los clubes. Y no estoy hablando de este último tiempo, sino de los últimos 30 años. También en ese lapso las gestiones en los clubes no han sido las mejores y las acciones han sido nulas”, dijo Brito, pero luego aclaró que por más intención de poner orden que haya “no podemos de un día para el otro dejar afuera al 90% de los clubes, pero sí sabemos que tenemos que tener una posición muy dura con los clubes que deben plata a los jugadores, y en ese sentido vamos a tomar mucha rigurosidad”.

El dirigente calificó al Fair Play Financiero como “algo que todos queremos”. Agregó al respecto: “Habrá un órgano adentro de la Superliga que controle los presupuestos de los clubes y que cada club al momento de contratar un jugador o de aumentar el presupuesto pueda demostrar que ingresos tiene a cambio y de esa manera evitar que se contraten jugador y que no puedan pagar. Esa es la lógica de la Superliga y creemos que para fortalecer al producto necesitamos tener este Fair Play Financiero y que la competitividad sea sana”. Se entiende entonces que buscarán no permitir que un equipo pueda hacer contrataciones importantes, que alcance un logro deportivo y que después en lo económico le traiga problemas a toda la Liga. 

Brito, afirmó que en primer término “no se le permitirá al club en cuestión incorporar nuevos jugadores. De ahí se irá subiendo el castigo, hasta lo más alto, que puede ser perder la categoría”. Al toque, el directivo dejó en claro que “eso no se va a dar ahora porque recién estamos empezando”.