(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) En el marco de su visita a Buenos Aires, que le puso un paréntesis a sus vacaciones en Alicante, el responsable económico y financiero de la 'La Liga', José Guerra Álvarez, se sentó con DOBLE AMARILLA para una entrevista a fondo que recorrió todos los temas y puso en comparación el proceso español con el que está transitando la Superliga argentina.

- Periodista: En el diagnóstico de la creación de la Superliga, Mariano Elizondo siempre enfatiza que la base de una competencia pujante y creciente es tener clubes con economías sanas. ¿Cuál es la experiencia que tienen ustedes en la Liga española?

- José Guerra: Coincido con Elizondo porque la estrategia que planteó Javier Tebas cuando llegó a la presidencia de 'la Liga' tenía como uno de los pilares tener una competición económicamente saludable y los otros dos eran erradicar la violencia en los estadios y luchar contra el posible amaño (arreglo) de partidos. Lo que se busca es hacer un espectáculo para todos los públicos que no genere tensiones porque económicamente la competición o los clubes tengan deudas con el fisco, con la agencia tributaria, con los jugadores o entre los clubes. Porque al final todo eso lo que genera es poner muchas trabas a la hora de intentar vender tu producto televisivo o llevar a esa liga a un estadio superior. Porque un operador de TV a nivel internacional lo que quiere es un torneo que no le de problemas y sea previsible.

- P: En este escenario 'la Liga' tiene que ser el órgano de control. ¿Cuánto cuesta en España lograr que los clubes sean ‘económicamente sanos’ y cuáles son los mecanismos que ejerce la Liga para garantizar este escenario?

- JG: Nosotros en España tenemos un departamento que lleva el control de los 42 clubes de fútbol profesional (20 de la primera división y 22 de la segunda) que integran tres analistas. Lo que es muy importante es tener una regulación específica que sea aplicable a todos los clubes, un marco normativo donde cualquier club sepa cuáles son sus posibilidades y que ese marco normativo que además prevea una serie de sanciones si alguno de ellos no cumple con las obligaciones que les imponen. No hay mucha más complejidad, porque realmente lo que se le está pidiendo a los clubes es algo muy razonable: es que sean económicamente sostenibles, que no tengan pérdidas, que puedan asumir sus deudas y que puedan pagar sus compromisos.

- P: En esas potenciales sanciones, ¿ustedes con el correr del tiempo han tenido que sancionar menos porque los clubes se han ido adecuando a las exigencias o han tenido que tener más mano dura?

- JG: Sin duda el volumen de sanciones ha ido a menos y tampoco tenemos una historia tan larga de control económico. Empezamos a implementar primero un sistema parecido al Fair Play Financiero de UEFA en la temporada 2012/13 y en la siguiente uno propio al que denominamos “Control Económico a Priori” –que trabaja sobre los presupuestos de los clubes-, porque el de UEFA actúa sobre el pasado y entendimos que da unos resultados limitados, en nuestra opinión. Al final lo que costó es que los clubes aprendieran a aplicar la norma y eso llevó una serie de sanciones, pero no vimos una intención de ellos de saltar la norma o de engaño.

- P:  ¿Cómo trabajan la adaptación y la aceptación de las normas de los clubes que ascienden a segunda división y se incorporan a la LaLiga?

- JG: Lo hacen de una forma drástica porque tienen que adaptarse a las mismas normas y tienen un período de dos meses para hacerlo. Generalmente a lo largo de la temporada tenemos contacto con los clubes con chances de ascenso desde la Segunda División B para ir trasladándoles las exigencias de sumarse al mundo profesional. Cuando ascienden lo hacen de una manera rápida porque tienen que auditar sus cuentas, preparar sus presupuestos, cumplir con las exigencias de ratios que les imponemos a los otros clubes para inscribirse a la Segunda División… y tienen el tiempo justo de un verano.

- P: ¿Cómo ha sido la experiencia de la Liga española en el crecimiento de sus ingresos y hay una exigencia de los clubes que forman parte de ella por ir incrementando esos números?

- JG: Exigencia por parte de 'la Liga' no hay tal, lo que sí se ha ido produciendo es que la necesidad de tener ese producto previsible te permite lograr mejores dividendos en los mercados nacional e internacional. En el mercado de España ya era un producto premium pero empieza a tener desde hace unos años mayor visibilidad a nivel internacional y eso lo que genera es traer nuevos patrocinadores que te permiten incrementar tus ingresos comerciales. Una vez que logras ello y aumentan tus ingresos audiovisuales puedes invertir más en tu producto en vivo, en el campo, y termina en un círculo virtuoso. 

- P:  ¿Cómo fue el proceso que llevó a 'la Liga' a potenciarse al punto de dejar de pelear económicamente con las cinco grandes ligas europeas y ubicarse en el segundo escalón definitivo detrás de la Premier League?

- JG: Primero fue una cuestión de identificar los drivers o palancas que te permitían crecer internacionalmente y allí Javier Tebas diseñó un plan estratégico que tenía como un pilar fundamental internacionalizar 'la Liga'. Hoy en día tenemos presencia en 53 países y estamos cerca de nuestros operadores de TV y patrocinadores, además de estar cerca de otras ligas para potenciar el fútbol en general. Hemos luchado por tener una imagen de marca y tener una comunicación para hacer entender al mercado internacional qué era la Liga. Ahora mismo hemos superado con solvencia a la Bundesliga y nos estamos acercando a la Premier. Estamos entendiendo qué producto tenemos en nuestras manos, ya no es un producto sólo de deportes o de fútbol. Nuestra competencia es el mercado del entretenimiento.

- P: ¿En este posicionamiento de marca 'la Liga' ha consolidado un producto que va más allá de los nombres que le permite superar el éxodo de jugadores como Neymar o Cristiano?

- JG: Absolutamente. Hace cuatro o cinco años 'la Liga' podría haber estado preocupada por la salida de un jugador como Cristiano Ronaldo. Hoy en día 'la Liga' tiene una imagen de marca que perfectamente hace que esa salida se viva a la espera de definir quiénes serán las siguientes tres estrellas que lo sustituirán. No es una preocupación que se vaya un jugador como él sino un orgullo que haya estado jugando tantos años en nuestra competición.

- P: En este contexto, ¿Messi es la marca más fuerte de la Liga española?

- JG: Ha acompañado el crecimiento de 'la Liga' como otros tantos jugadores. Leo es un referente internacional pero nuestra liga tiene una entidad o marca para que esas estrellas brillan dentro de una competencia que ya brilla más allá de los nombres.

- P: ¿Cómo está afrontando 'la Liga' la venta de los derechos en una diversidad de plataformas?

- JG: Estamos intentando conocer cómo va a ser el futuro de esas plataformas. Creo que muy pocas industrias tienen en claro cómo va a ser el futuro de la industria del entretenimiento con la cantidad de novedades e innovación tecnológicas que se producen. Los cambios son tan rápidos que es muy difícil saber a dónde va a ir la industria de acá a dos o tres años. Es muy difícil. Creo que el objetivo es atraer a nuevos públicos que tienen hábitos de consumo distintos con herramientas tecnológicas que estamos muy pendientes de conocer día a día. ¿Cómo nuestro producto va a estar en las plataformas como Facebook o Twitter y cómo se van a generar recursos a través de ellas? Es pronto para saberlo. Pero, sin dudas, van a ser importantes y por eso hay que estar atentos para lograr una forma de comercialización de esa herramienta de futuro.

- P:  ¿Cómo está el proyecto de reducción de la brecha entre los equipos que más y menos ganan en 'la Liga'?

- JG: Esa brecha se cierra manteniendo la capacidad de los grandes porque no puede suponer menoscabar la capacidad económica de los clubes que han llegado a determinado nivel. Gracias a las mejoras del producto televisivos hemos logrado que los pequeños se fuesen acercando a los grandes. Ahora estamos en una diferencia de 3.58 veces entre el equipo que más y que menos gana en 'la Liga', y habíamos alcanzado una diferencia entre 10 y 12 veces.

- P: ¿Qué sucede con la diferencia que genera la participación de los clubes en Europa que con premios cada vez más grandes profundiza esta brecha?

- JG: La posición de la Liga es que deberíamos conseguir que la participación en las competencias europeas no generara unas brechas que estamos consiguiendo eliminar dentro del mercado español. Nosotros estamos convencidos que lo que hay que mantener es el producto fútbol como espectáculo fuerte. No vale con qué sean fuertes ciertos equipos sino las ligas, y no sólo la española o la inglesa sino todas para que el negocio del fútbol nos haga crecer a todos. Entonces debemos buscar mecanismos para que las participaciones europeas no genere desequilibrios en un mercado interno donde tendemos a disminuir las brechas.

- P: ¿Cómo es el diálogo con UEFA en esta tensión donde ellos piden cada vez más participantes?

- JG: Creemos que cuántos más equipos de las cinco ligas grandes (Premier, Liga, Bundesliga, Ligue 1 o Serie A) haya en competiciones europeas perjudicamos a las otras ligas porque generamos que cada vez sean menos competitivas y tengan menos capacidad para retener sus talentos y generar espectáculos. Entonces está generando un problema de desestructuración del fútbol internacional, y no sólo a nivel europeo. Los ingresos por los derechos de TV de las competiciones UEFA a un club puede ser lo mismo o más de los ingresos para la mitad de los clubes en España.

- P: ¿Cuál es la relación de 'la Liga' con el Fisco español?

- JG: Tenemos dos facetas. Una es que el resultado de la actuación de 'la Liga' en las últimas cuatro o cinco temporadas, gracias al control económico a priori, ha reducido una deuda que teníamos de 650 millones de euros a principios de 2013 a 74 millones de euros en junio de 2017. Esa cifra está calendarizada en los concursos de acreedores y que prácticamente desaparecerá en los próximos años y los clubes de 'la Liga' estarán en una situación de la que nunca debieron haber salido, que es la de no tener deudas con la Agencia Tributaria.

Por otro lado lo que pedimos no es un cambio en cuánto a la regulación de cómo se tratan a los jugadores sino que pedimos que se los considere de la misma forma que se trata a otros profesionales dentro de España, donde hay una política de atraer talentos de otras partes del mundo para la industria con un tratamiento fiscal preferente por unos determinados años. Esa política tiene como única excepción a los jugadores de fútbol. Si lo que queremos es traer talento y estamos demostrando que el fútbol puede hacerlo y generar buenos beneficios para el Fisco español –somos más del 1% del PBI local- no queremos que los jugadores sean la excepción a la norma.

- P:  Con respecto a las transferencias, ¿Ha habido alguna modificación en cuánto a las retenciones o costo impositivo por parte del Fisco español?

- JG: No ha habido modificaciones y en cuanto a las transferencias con el extranjero dependen mucho de los tratados bilaterales de comercio con cada uno de los países y la calificación. Es un tema fiscal que no ha cambiado en los últimos años y tampoco en la relación bilateral con Argentina.

- P: ¿Cómo es la relación de 'la Liga' con la Real Federación Española?

- JG: La experiencia ha sido con distintos enfoques con el anterior presidente (Ángel Villar) en cuánto a cómo debía evolucionar el fútbol, donde sentíamos que la Federación no acompañaba el proceso de mejor que llevaba adelante la Liga. Ahora hay un presidente nuevo que lleva unos meses y por ahora estamos haciendo cosas conjuntamente y la implementación del videoarbitraje (VAR) ha sido muy buena. Esperemos que en el futuro tengamos similares caminos al desarrollo de la industria del fútbol con la conducción de Luis Rubiales.

- P:  ¿Cómo es la relación con FIFA en cuánto a la cesión de los jugadores de los clubes que integran 'la Liga' hacia las selecciones nacionales?

- JG: Participar en la selección nacional para un jugador es tan bueno como para 'la Liga', la selección nacional y el fútbol de ese país. Ese reconocimiento y proyección internacional no se discute sino que hay que buscar acuerdos para que los posibles efectos negativos (lesiones o dificultades para estar concentrados en momentos de 'la Liga') se llegue a un acuerdo entre jugadores, liga y federación para que estén conformes. Ahí se ha trabajado mucho y los clubes siguen dispuestos a ceder a sus jugadores.