(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Caminante no hay camino, se hace camino al andar, canta el 'Nano' Serrat en uno de sus temas más conocidos y la Selección Argentina parece tributarlo. El equipo de Lionel Scaloni se va construyendo a medida pasan los partidos. 

Como quién no quiere la cosa, y sin subir mucho la voz, el elenco de Scaloni firmó el segundo mejor arranque desde que las Eliminatorias son de todos contra todos, sistema que empezó en el camino rumbo a Francia 1998, igualando al de la recta previa a Alemania 2006.

Suma 10 puntos sobre 12 posibles y volvió a ganar en La Paz, algo que no conseguía desde hace 15 años y también triunfó de nuevo en Lima, Ciudad dónde no ganaba por Eliminatorias desde la época de Marcelo Bielsa. También venció a Ecuador en La Bombonera y terminó por empatar ante Paraguay en su segunda presentación como local.

Pero, la mejor noticia, ni siquiera son los números, que son buenos. Si no, dos cosas que están ocurriendo y ya no son una excepción y parecen ser la nueva regla. La primera de ellas, es que la renovación ya está aquí. Armani, Montiel, Martínez Quarta y Tagliafico ya parecer ser fijas en la defensa, junto a Nicolás Otamendi, uno de los pocos de la vieja guardia que aún siguen vigentes, junto a Ángel Di María, que demostró que todavía tiene con qué.

Por supuesto, también hay que contar a Lionel Messi, pero ya llegaremos ahí. En el medio, Leandro Paredes y Giovanni Lo Celso o Exequiel Palacios, parecen ya haber hecho méritos para quedarse con esos lugares, lo mismo que Rodrigo De Paul, que se afianzó mucho. Ni hablar adelante, dónde Lautaro Martínez sentenció la polémica sobre el sucesor de Higuaín en ese lugar. Lucas Ocampos es otro nombre a tener en cuenta y, claro, también Nicolás González, el del Stuttgart mostró polifuncionalidad y gol, dos cualidades más que importantes en este camino a Qatar.

¿Y Messi? Bueno, lo de Lionel Messi es la segunda gran noticia. Lio ya no es todo, si no que forma parte de. Y eso es una grandísima novedad y mérito del equipo de Scaloni. Por supuesto, a Messi lo siguen buscando los compañeros y lo siguen marcando los rivales, pero Messi ya está más parado de lanzador y de armador de juego que de finalizador. Ya no tiene que sacarse de encima a 3 o 4 camisetas para pesar en un partido. Esta es una Selección Argentina que contiene a este Messi maduro, mucho más pensativo que explosivo y no el equipo de Messi que juegan con una camiseta albiceleste. Y esa es la verdadera gran noticia de este 2020. 

Parece que Brasil anda un escalón por arriba de los demás, algo indudable dada la calidad de sus futbolistas y dónde juegan, pero contra el resto, la Selección Argentina parece tener con qué competir e, incluso, puede hacerlo en gran nivel. 

Después de estas primeras 4 fechas de Eliminatorias, la base rumbo a Qatar parece estar. Armani (Andrada), Montiel, Quarta (Nehuén Pérez), Otamendi, Tagliafico; Paredes (Guido Rodríguez), De Paul, Lo Celso(Palacios), Lionel Messi (Papu Gómez), Nicolás González (Joaquín Correa), Lautaro Martínez (Lucas Alario), Ángel Di María (Lucas Ocampos). A ellos hay que sumarle a Juan Foyth, Germán Pezzella y habrá que ver qué ocurre con Sergio Agüero y Paulo Dybala, quienes parecen estar cada vez más afuera del proceso rumbo a Qatar 2022.

La base está, los resultados también y es una gran noticia de cara a lo que será un 2021 que empezará en marzo, con los duelos ante Uruguay en Santiago del Estero y Brasil, como visitante. Además del grueso del camino rumbo a Qatar, el próximo año contendrá la Copa América, que se jugará mitad en el suelo argentino y mitad en colombia. Un año con muchos desafíos, al que Argentina llega más entera, convencida y formada que a inicios de este 2020. El año de la pandemia, y el año en que se vislumbró la tan mentada nueva Selección Argentina.