(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Cristian Bove, DT de Peñarol de San Juan, habló en exclusiva con Doble Amarilla luego de los lamentables sucesos que tuvieron lugar en el estadio de Sporting Club Victoria. Después de que Pablo Toviggino, presidente del Consejo Federal, le confirmó a este medio que la institución donde ocurrieron los incidentes será desafiliada, el entrenador se expresó y brindó tristes detalles de todo lo ocurrido, que "pudo ser una verdadera tragedia".

En primer lugar, Bove señaló que los incidentes no iniciaron con el partido, sino en la noche de su llegada a la Provincia de San Luis: "Gente conocida nos había dicho que se estaba preparando una movida para atacarnos en el lugar donde nos hospedamos. Cancelamos la reserva en el día anterior y fuimos a Potrero de los Funes, cerca de San Luis, para no tener ese problema. Llegamos de noche, cosa que no nos vean", indicó.

Sin embargo, cambiar de lugar no fue solución; hubo agresiones esa misma noche: "Vino la Policía y dijo que no teníamos que preocuparnos, que iban a cuidar. A las dos horas, tuvimos visita de algunas personas que vinieron a tirar bombas de estruendo y rompieron el colectivo, cerca de las 2 de la mañana. La Policía no estuvo, nos dijeron que justo habían hecho el cambio de guardia", relató Bove.

"Ya en el partido, fue todo una vergüenza. Recibimos insultos de los jugadores de ellos, nos hostigó hasta el cuerpo técnico. Le pedí a mis futbolistas que no se prendieran en ninguna, hasta nos cortaron la luz y el agua. Abrimos las ventanas para tener algo de visión y nos tiraron cosas. Así y todo, se jugó el partido, que tuvo patadas, insultos de los jugadores suyos a los nuestros... de todo, hasta al árbitro lo desprotegieron, la Policía no actuó", siguió.

No obstante, la peor parte arrancó luego del arranque del segundo tiempo: "En el entretiempo, el capitán de Sporting Club, Roberto Vallejos, que también es presidente del club, comisario y era jefe del operativo de seguridad de la Gobernación de San Luis, dijo que había garantías y que el partido podía seguir. Al minuto 30 del segundo tiempo, empezaron a caer bombas de estruendo. En un momento, los hinchas empiezan a saltar el alambrado e Infantería no pudo retenerlos", explicó.

"Fuimos al vestuario por orden del árbitro, porque no había garantías. Cuando quisimos salir, la Policía puso el pasador y nos cerró el portón. Éramos 20 que aguantamos lo que pudimos, fue una batalla campal, eran 100. Finalmente, un jugador nuestro pudo romper el alambrado y salimos del estadio por ahí, como se ve en las imágenes. Solamente por Infantería no fue una tragedia, a las afueras de la cancha nos sacaron de ahí con un furgón", expresó, completando el relato de una tarde lamentable.

Para cerrar, Cristian Bove reflexionó sobre lo acontecido y destacó el Consejo Federal: "Esto mancha al fútbol argentino, sin dudas. Los protagonistas somos los que tenemos que dar el ejemplo y no fue lo que ocurrió en este caso. No soy quién para decirles cómo actuar, pero la gente del Consejo Federal está muy capacitada, los ejemplos son buenos"siguió.

"Los partidos de fútbol no se ganan así, no se ganan rompiendo autos ni golpeando gente. En los dos años en los que estuve en Peñarol de San Juan, soy el primero en trabajar y en saber que los partidos se ganan con trabajo y jugando lo mejor posible. Tengo jugadores que son fenómenos y guerreros, se aguantan muchas cosas y les cuesta llegar a fin de mes porque nuestro presupuesto es bajo, pero tratamos de dar el mejor ejemplo en cualquier cancha", concluyó Bove en diálogo con Doble Amarilla.