Insólitamente, a sólo 15 días del puntapié inicial de la Copa América, el torneo más importante de selecciones del continente no tiene sede. En la noche del domingo, Conmebol suspendió la organización del torneo en la Argentina. Así lo confirmó a través de un comunicado publicado en redes sociales. El organismo, a la vez, anunció que "ya analiza la oferta de otros países que mostraron interés en albergar el torneo continental". Este lunes por la mañana, habrá una reunión de urgencia del Consejo de Conmebol para tomar una definición. ¿Cuáles son las alternativas?

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El fin de semana había optimismo, pero todo cambió el domingo por la tarde. Ante la compleja situación epidemiológica, hubo una decisión presidencial de no tomar riesgos y avisar a Asunción que no estaban dadas las condiciones para hacerla. Ante esto, Conmebol no tuvo otra alternativa que dar de baja a la Argentina como anfitrion.

El organismo presidido por Alejandro Domínguez tenía confianza y venía trabajando para que el certamen se pueda hacer en la Argentina. Pero en horas de la tarde-noche, recibió un revés contundente de parte de las autoridades nacionales. 

La última reunión fue el miércoles. En ese encuentro, el Gobierno presentó un estricto protocolo con medidas sanitarias para habilitar que el torneo se dispute en territorio argentino, ya sea parcialmente o en su totalidad. Luego del cónclave, hubo varias charlas. Conmebol, inclusive, envió una circular a las distintas asociaciones porque Argentina solicitaba que las delegaciones tengan a sus integrantes vacunados. Todas lo habían aceptado.

Hasta el día de hoy, la Conmebol veía con buenos ojos que la Argentina organice la Copa América. De hecho, desde la Confederación tomaron de mala forma las declaraciones del sábado por la noche de Mauricio Macri, entendiendo que buscaba boicotear la Copa América por conveniencia en el marco de una disputa política. Esta tarde-noche, se encontraron con el aviso del Gobierno: por la situación sanitaria, no podía dar garantías durante esta semana. Con ese panorama, la Confederación se vio obligada a bajar al país de la organización.

Minutos antes del anuncio de Conmebol, el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, había anticipado que era muy difícil que el certamen se dispute en la Argentina"Estuve conversando hoy con el presidente Alberto Fernández sobre la situación sanitaria de todas las jurisdicciones, y en particular de Buenos Aires, Tucumán, Mendoza, Córdoba y Santa Fe, y siendo coherentes con el cuidado de la salud vemos que es muy difícil que se juegue la Copa América en nuestro país", indicó en diálogo con C5N. Más temprano, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, también había marcado que no estaba "100% definido" que Argentina fuera sede del torneo.

Las alternativas

Este lunes entre las 9 y las 10, habrá reunión del Consejo de Conmebol, según confirmaron altas fuentes del organismo a Doble Amarilla. Fueron citados todos los presidentes de las asociaciones en carácter de urgencia. Las mismas fuentes aseguraron que aún no hay ninguna definición sobre dónde se jugará la Copa.

Chile, Paraguay y Estados Unidos presentaron propuestas para organizar la parte que Colombia dejó hace unos días. Es por eso que hoy suenan como alternativas. Se baraja, además, un ofrecimiento de Qatar. Fuentes de Conmebol confiaron a este medio la semana pasada que la organización en Estados Unidos tiene a favor la posibilidad de realizarla con público en los estadios. Sin embargo, los permisos que requiere un evento de esa magnitud no se consiguen rápidamente, por lo que con sólo 15 días luce como una opción complicada.

Chile también habría ofrecido disputar algunos partidos con aforo. En tanto, Paraguay es la opción que menos inconvenientes le trae a Conmebol, aunque no es la deseada.

El no del Gobierno

En todo este tiempo, el Gobierno no paró de incurrir en contradicciones respecto a la Copa América. Aún cuando Conmebol no había bajado a Colombia, el mismo presidente Alberto Fernández coqueteó públicamente con la posibilidad de organizar todo el torneo en territorio argentino. Sin embargo, demoró la decisión. Con el tiempo justo, Conmebol pidió una reunión cara a cara con el Gobierno. Ese encuentro se dio el miércoles pasado y fue gestionado directamente entre Alejandro Domínguez y Fernández.

Tal como contó este medio, durante todo el fin de semana hubo diálogo entre Asunción y Buenos Aires. Todo parecía encaminarse para que el lunes o martes se diera el anuncio. Sin embargo, el domingo por la tarde todo cambió. En Gobierno dicen que no se bajaron, sino que no podían aún dar la respuesta que Conmebol necesitaba. Otras fuentes reconocen que se tornó impopular la realización de la Copa América. "Con la oposición usándolo como bandera, era difícil. No es fácil salir del dilema 'escuelas no y fútbol sí' por más que es una falacia. Si algo salía mal, iba a ser muy complicado salir de eso", reconoce una alta fuente del Ejecutivo a Doble Amarilla.

En las últimas horas, había salido una encuesta de la consultora Poliarquía que revelaba que el 70% de los encuestados consideraba que el torneo no debía organizarse en el país. Hay un dato que no es menor. El sondeo refleja que esa opinión crítica es compartida por el 72% de los entrevistados que se definen como “cristinistas”. ¿Habrá sido la vicepresidenta la que finalmente le bajó el pulgar al torneo?