Ganadores y perdedores de una elección histórica
LOS GANADORES
Chiqui Tapia
La dudas eran si pasaba el análisis de idoneidad que debía realizar la CONMEBOL y si Macri no le bajaba el pulgar a último momento. Los votos los tenía. Pero el acuerdo inicial con Angelici y la posterior bendición de Alejandro Domínguez lo acercaron definitivamente a su sueño de conducir la AFA. Gran ganador.
Daniel Angelici
Acostumbrado a capear las grandes tormentas, acá fue apuntado por todos los sectores -propios y ajenos- y el tipo nunca se dio por vencido. Su versatilidad para jugar siempre una ficha más lo han ayudado a lograr lo que quiso desde un principio: manejar el poder de la AFA desde su cargo de "operador del gobierno" en el fútbol. Puso a Tapia en la AFA y a Tinelli en la SuperLiga. El los avaló. El los bendijo.
Marcelo Tinelli
Después del 38 iguales cayó en un pozo del que tardó 6 meses en asomar. Esta vez, si iba por la AFA no tenía los votos. Pero... al final se queda con dos tesoros muy preciados: el manejo de la Selección Nacional (si no hay un volantazo de Tapia a último momento) y presidirá la SuperLiga. Demasiado para alguien que se veía afuera de todo por la gran desilusión que le había provocado el 38 iguales.
Pablo Toviggino
Llego de Santiago del Estero desempolvándose el traje. Pero no se movió ni un ápice del plan inicial de conseguir votantes del Consejo Federal. Hizo un trabajo de hormiga y funcionó. Ya es el cerebro de Tapia, su mejor ladero y quien va a reorganizar los torneos del interior para hacerlos más viables. Será uno de los dos puestos rentados de la AFA. Le cierra todo.
LOS QUE EMPATARON
Rodolfo D'Onofrio
Trató de diferenciarse de Angelici. Pero se alejó tanto de las idas y vueltas en la AFA que casi se queda afuera de todo. Finalmente, será vicepresidente primero de la Superliga. Tira en tándem con Tinelli.
Fernando Marín
El primer objetivo, que era sacarle de encima al gobierno el FPT, lo cumplió. Pero el resto, participar activamente del reordenamiento de las estructuras del fútbol argentino, no fue conveniente. Y se fue de la AFA sin pena ni gloria.
Nicolás Russo
Quizo ser la imagen del primer recuerdo lindo de esta dirigencia. Empezó a hablar cada vez con màs extensión en los sitios del grupo Fox y Turner. Pero falló. Y el reciente salvataje de los derechos audiovisuales queda en Manos de Tiunell
Hugo Moyano
Amenazaba con quedarse con todo. Pero poco a poco su imagen de dirigente se fue desdibujando. Siempre quiso poner un pie en el fútbol. Pero quedó relegado a un 3er o 4to cuarto puesto en el orden a és quienquiera atañe 1 de importancia. Va a quedar como custodio del proyecto de su yerno. Y lo vigilará con sus operaciones políticas.
LOS PERDEDORES
Armando Pérez
Pretendió ser un ordenador. Pero no le salió una: primero defraudó a sus.impulsores (entre ellos, Mauricio Macri). Después polemizar con sus compañeros de la CN. Y al final, ningunear a todo el mundo. Gran fracaso
Mauricio Macri
Fue un gran derrotado. Tuvo clara intención de hacer usufructo del fútbol principalmente en el ámbito político. A priori la única batalla ganada fue la de cumplir una promesa de campaña y cortar las erogaciones del Fútbol Para Todos. Luego fracasó en instalar el debato por las Sociedades Anónimas y no pudo poner a ninguno de sus alfiles en la presidencia de AFA. Se resignó a aceptar a Claudio Tapia cuando las encuestas reflejaban que su intervención en el fútbol ya golpeaban por demás su imagen.
Fernando Mitjans
En principio sonaba como un probable presidenciable de la AFA. Pero al no ser nombrado presidente de la Normalizadora, se sintió usado. Y ahí empezó a cuestionar todas las medidas de FIFA y la CN. Poco a poco fue perdiendo posicionamiento hasta que explotaron los audios de Angelici. Ahí salió de escena y hasta Armando Pérez pidió su renuncia. Por ahora, está atrincherado aún en el Tribunal de Disciplina de la AFA. Pero hay que ver qué pasa con él la semana próxima. Uno de los grandes perdedores.
Sergio Marchi
El conflicto final lo desgastó mucho en 3 frentes:
1-Con los jugadores: ya se le animan a plantear diferencias y lo critican en off por no aportar soluciones sino hacerse fuerte en el conflicto.
2-Con los funcionarios: quedó muy estigmatizado como un intransigente sin respaldo de base. De hecho el gobierno nacional vería con buenos ojos que haya una renovación de autoridades en el gremio. Incluso sonó el nombre de Raúl Cascini para suceder a Marchi.
3-Con la sociedad: a raíz de la postergación del regreso del fútbol, el hincha quedó saturado de las explicaciones y exposición del secretario
Matías Lammens
Primero se pegó a la "intervención" de Angelici y quedó expuesto con su conducta de asfixiar económicamente a los clubes. Después dio un paso al costado cuando la situación lo superaba. En San Lorenzo perdió no sólo la confianza de su mentor sino que también, si Tinelli asume en la SuperLiga, se quedará sin el factotum del éxito de su gestión. Perdió por todos lados.