La cuenca lechera santafesina hace un tiempo bastante largo que no tiene motivos para sonreir. A los magros resultados de “Atlético” en Primera División, se le suma la profunda crisis de la empresa láctea por excelencia de la zona, SanCor.

¿Qué tiene que ver un tema con el otro? Que la Asociación Mutual Social y Deportiva Atlético de Rafaela (según reza su nombre, porque no es un club, sino una mutual) está íntimamente ligada a los vaivenes de SanCor. Cuando post crisis de 2001 SanCor resurgió, la empresa inyectó dinero en el equipo celeste y éste alcanzó el ascenso a Primera en 2003. Tras bajar y subir, tuvo relativo éxito en Primera División (permanencia en la máxima categoría y proyección de juveniles).

Se sabe que SanCor está al borde del colapso. Se analizaron múltiples variantes para salir del pozo, y la última fue pedirle a los empleados que le presten a la firma el 15% de sus salarios, algo que fue aprobado (y hasta dicen, impulsado) por el sindicato (Atilra). Será por seis meses, y el dinero le será devuelto en ¡un año!  “Los trabajadores y el gremio estamos tratando de contribuir con todo lo que más podemos para que la empresa continúe de pie", dijo ayer en declaraciones periodísticas Nicanor Villafañe, secretario de Atilra Gálvez, quien analizó que la situación que viven los trabajadores sigue siendo “de incertidumbre, porque en este acuerdo está incluido que a partir de abril deberían empezar a pagar en tiempo y forma, pero no hay seguridad, ni tampoco credibilidad“.

En la actualidad, según informó Villafañe, hay empleados a los que le deben una parte del sueldo de enero y todo marzo, “hay otros de categorías menores que les están debiendo marzo… No sé cómo harán para refinanciar esa deuda, y en cuántas cuotas”.

Mientras tanto, el logo de la empresa sigue apareciendo en la camiseta de la Crema, la empresa ¿sigue? pagando por el sponsoreo y la industria lechera está paralizada en toda la zona. Curiosidades de una institución que dice estar en orden, pero que con sólo bucear un poco con la intimidad de Rafaela se descubre que aquello que brilla desde afuera como una institución modelo, está atado a la plata de una empresa como SanCor.

“Tenemos confirmado que hubo demoras en el pago del sponsoreo no se estuvo pagando durante meses”, indican fuentes periodísticas de la zona que ruegan quedar en el anonimato. En las entrañas de la Crema dicen desconocer ésta situación. “Cerramos el mejor balance en años”, dijeron antes de cortar el contacto con Doble Amarilla. 

Además, esta situación podría agraverse aún más. El Gobierno Nacional se comprometió en enviar un salvataje de $450 millones que suena a una gota de agua en el desierto. Con un pasivo de $5.900 millones, es claramente sólo una gota que sólo postergará una solución final si las condiciones se mantienen. Ese desembolso está atado a que la empresa no despida ningún empleado por 6 meses. La particularidad es que ese dinero será administrado por representantes del Gobierno Nacional. ¿Qué priorizarán las autoridades, el sponsoreo o el dinero para los sueldos?. 

Cuando se corta el dinero, se viene a pique la producción no sólo de leche, sino también futbolística. Y queda le Crema cortada.