Este sábado conmemoramos el tercer aniversario de la desaparición física de Diego Armando Maradona. Ese 25 de noviembre de 2020 quedó marcado en nuestra memoria y todos recordamos dónde estábamos y qué hacíamos cuando nos enteramos de la noticia que nos golpeó fuertemente.

En horas de la mañana comenzaron a surgir rumores y alertas por la llegada de ambulancias al barrio San Andrés, ubicado en las inmediaciones de Nordelta, lugar en donde vivía el '10'.

La noticia del fallecimiento del astro llegó alrededor de las 13, con periodistas conmocionados contando la información. Inmediatamente se realizó una guardia periodística en las afueras del barrio en el que se alojaba Maradona y llegó la confirmación. "Lamentablemente podemos confirmar el fallecimiento de Diego Armando Maradona a las 12 horas del día de la fecha. No se advirtió ningún tipo de criminalidad ni de violencia", fueron las palabras de John Broyad, jefe de los fiscales, por la muerte de Maradona.

El ambiente cambió, las calles se volvieron silenciosas tras uno de los golpes más duros que podría recibir la patria futbolera y muchos fanáticos decidieron refugiarse en algunos espacios icónicos de la capital federal como las canchas de Boca y Argentinos Juniors. También ocurrió en Rosario por el pasado de Diego en Newell's y en Napoli, Italia.

Ese fatídico 25: así fue el miércoles del anuncio de la muerte de Maradona
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Ese fatídico 25: así fue el miércoles del anuncio de la muerte de Maradona
Ese fatídico 25: así fue el miércoles del anuncio de la muerte de Maradona

Al día siguiente, una multitud de hinchas lloró y despidió al '10' en Casa de Gobierno, en medio de un clima complicado con una comunión por parte de los fanáticos, que dejaron las rivalidades de los clubes atrás, y se unieron en el dolor, pero también con incidentes.

Ese fatídico 25: así fue el miércoles del anuncio de la muerte de Maradona
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El cuerpo de Maradona descansa en el cementerio de Bella Vista, donde se reencontró con 'Doña Tota' y 'Don Diego', a quienes extrañó mucho en vida. Mientras tanto, por acá, todos los días lo seguimos recordando. Porque el Diego es para siempre.