(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Este martes a las 15, Argentina enfrentará a Nigeria por el último partido de la fase de grupos y lo hará en San Petersburgo, la segunda ciudad más grande de Rusia, con aproximadamente 5 millones de habitantes.

Esta ciudad tiene historia: fue víctima de una de las tragedias más grandes de la historia durante la Segunda Guerra Mundial.

Leningrado (tal como se la conocía a San Petersburgo a mediados del siglo pasado) fue el blanco de la Alemania Nazi de Adolf Hitler en junio de 1941, cuando el ejército alemán cruzó fronteras con el objetivo de borrar del mapa a la tierra que se denominaba como símbolo de la cultura rusa.

El 8 de septiembre de ese año los alemanes cercaron la ciudad, bloquearon todas las salidas terrestres, bombardearon y decidieron matar de hambre a los habitantes de esa ciudad, ya que las provisiones alcanzaban para un mes. Además, el clima era otro de los problemas graves, ya que el promedio era de -35°.

El Camino de la Vida (ruta de transporte que atravesaba el lago Ládoga congelado) fue el camino de liberación para los soviéticos. Se pudieron rescatar más de 600 mil personas y a muchos niños los salvaron de la muerte. Los que se quedaron, comenzaron a trabajar para abastecerse de comida e hicieron lo posible para sobrevivir.

El 14 de enero de 1944 llegó el final. Los soviéticos atacaron a un ejército alemán, lograron volver a abrir las puertas de a ciudad y forzar la retirada Nazi. 

En Leningrado quedaban 800 mil personas. En el inicio del conflicto había más de tres millones. Se estima que fueron un millón doscientas mil las víctimas y el 90% perdieron la vida a causa del hambre.