(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El conflicto entre el SADRA y sus representados empieza a llegar a su desenlace y, luego de una reunión del último lunes en AFA, Sergio Pezzotta explica los por qué acompaña a este movimiento, ratifica que ya son entre 130 y 150 los jueces que se fueron del gremio y resalta el personalismo de Guillermo Marconi que se puso por encima de la institución con una política de judicializar todos los temas todo el tiempo.

DOBLE AMARILLA: ¿Cuántos son los árbitros que decidieron dejar el SADRA en este último tiempo?

SERGIO PEZZOTTA: La cantidad va a rondar los 130/150 árbitros. Esto se dio porque la gente decidió optar por un cambio, no estaba de acuerdo con la política llevada adelante y en principio se juntaron por eso. Se fueron convenciendo personalmente de que la situación ya no daba para mas y decidieron dar el paso al costado.

DA: ¿En qué puntos no coincidían para darse cuenta que la situación no daba para más?

SP: Una política de choque constante, de judicializar todos los temas. Desde mi punto de vista de la política gremial me parece que se debe negociar. Todo lo que hemos conseguido lo conseguimos negociando. No podemos judicializar todos los temas por una cuestión de peleas personales. Por eso yo decidí dar el paso al costado hace mucho tiempo. De ahí en mas los árbitros intentaron mandar un mensaje, pero tampoco recibieron una respuesta y por eso cada uno fue tomando la decisión de abrirse. Con respecto a la reunión del lunes se decidió continuar dialogando y tener dialogo con una comisión representativa. Somos un grupo de árbitros y ex árbitros que asumimos la responsabilidad de representar a este grupo. En el interior muchos también tomaron la decisión de correrse.

DA: ¿Tuvo usted algún problema en cuanto a las formas dentro del sindicato?

SP: Fue una de las causas por las que me fui. Yo iba a negociar y del otro lado llegaban denuncias, cartas documento. Todo lo que hemos conseguido fue por gestión y con un grupo de muchachos que hemos ido a hablar e intentar solucionar los temas que quedaban pendientes. Llegó un momento donde vi que no había un deseo de resolver los problemas. Realmente creo que la política debiera ser otra y por eso decidí correrme. Había una política de judicializar todo que no nos va a llevar a nada, todo lo que se consiguió en el ultimo tiempo fue por gestión.

DA: ¿Le pidieron un paso al costado a Marconi en algún momento? 

SP: Eso se lo tenés que preguntar a los árbitros porque yo renuncie y no volví a ir. Los árbitros creo que sí hicieron algo, pero ellos te lo van a saber responder mejor. Yo no estuve en las reuniones, pero acá creo que hay algo que es fundamental y es que la institución esta por encima de todos. Cuando las personas se ponen por encima de las instituciones ahí es cuando empieza el problema.

DA: ¿Hay alguna posibilidad de que vuelva al gremio? ¿Qué condiciones debieran darse para eso?

SP: Yo no tengo la idea de volver. Yo lo sufrí bastante la parte de estos últimos meses de trabajo. Obviamente me incline a eso porque me gusta la gestión y trabajar por los compañeros. Todos saben lo que hemos trabajado dentro del grupo, pero tampoco tengo ganas de volver. La idea es recuperar la institución. No es algo que me movilice estar al frente de la institución. Acompaño a mis compañeros por una cuestión de respeto y porque ellos me lo pidieron. Tenemos una relación afectiva muy grande entre todo el grupo y uno siente el respeto de los compañeros. Hoy intentar disimular este movimiento tratando de culpar a la institución o a los dirigentes de la AFA me parece que sería subestimar la dirigencia de los árbitros y subestimar el posicionamiento de los árbitros. Por esa subestimación es que el gremio perdió el 85% de los representados en AFA. Y creo que en las Ligas va a pasar lo mismo, porque si en algo hemos fallado es en estar al lado de las Ligas del interior.

DA: ¿Pudieron hablar con AFA de este tema?

SP: Todos somos empleados de La Casa. Yo trabaje 2 años para el gremio y soy empleado de AFA. Me terminé yendo por una operación de columna, sigo siendo el mismo empleado y todos somos empleados de AFA. Nosotros lo que armamos fue una comisión representativa para tener posibilidades de dialogar con La Casa. Hemos presentado esa representatividad con los muchachos de Primera División y seguiremos trabajando para mejorar la calidad de trabajo de la gente. Obviamente que con la misma postura que lo hice desde que trabaje en el gremio: de dialogar, conseguir cosas, jamas pedí algo fuera de lugar, siempre he pedido cosas para el buen andar del arbitraje y en definitiva todos planteamos eso. En el interior hace mucha falta el trabajo, el estar con los árbitros, capacitarlos. La materia prima está y la renovación va a venir desde el interior.