(De la redacción de DOBLE AMARILLA) Las chispas de una tensión creciente entre AFA y Superliga terminó de estallar este mediodía con un comunicado que emitió la entidad madre del fútbol argentino contra su par que rige los destinos de la Primera división con el fixture del certamen y las complicaciones que generan a la Selección como tema principal… pero no el único.

Este fin de semana hubo intensos cruces en pos de intentar evitar este desenlace pero el primer conflicto fuerte del año estalló y promete escalar con varios nuevos capítulos. El detonante fue el cronograma de la recta final de la Superliga que en la conducción de Mariano Elizondo y su Mesa Directiva se pisa y no contempla, según entiende la AFA de Claudio Tapia, la participación de la Selección Sub 23 en el Preolímpico de Colombia.

En un extenso y duro comunicado, la Asociación del Fútbol Argentino sentencia: “La desafortunada y arbitraria actitud de programar 46 partidos del Torneo de la Superliga durante el desarrollo del Torneo Preolímpico revelan, por parte de la conducción de la SAF, un evidente desinterés y desapego a lo que significa nuestra selección nacional, y la trascendencia de que el fútbol argentino represente a nuestro país en la próxima cita olímpica”.

Durante el fin de semana hubo un ida y vuelta entre dos representantes de ambos espacios: Rodrigo Escribano, integrante de la mesa chica de Superliga que tomó un papel principal ante la ausencia de Mariano Elizondo por vacaciones, y Pablo Toviggino, Secretario Ejecutivo de la Presidencia en AFA y mano derecha de Chiqui Tapia. Esto fue luego que el 1º de enero haya una queja internal y formal desde Viamonte hacia Puerto Madero por este tema.

El ida y vuelta no pudo evitar este duro comunicado donde AFA además expresa: “La conducta desplegada por la conducción de la SAF, muy lejos de observar el espíritu de colaboración y consenso que debe existir entre ambas instituciones, pone a confrontar el interés público del Torneo de la Superliga con nuestra Selección Nacional, ocasionando un perjuicio injustificado a los intereses económicos que nutren a nuestro querido fútbol argentino”.

Esta carta se da en un contexto donde Nicolás Russo, presidente de Lanús, Carlos Bueno, Secretario de Arsenal y Julio César Falcioni, técnico de Banfield, se habían quejado por el calendario de Superliga.

Incluso Russo fue más allá y sentenció que la Superliga está dirigida por los cinco grandes y que no sería una mala idea disolver el ente y volver a la AFA. Estas quejas públicas conviven con algunas que críticas de calendario que se hicieron en forma directa como San Lorenzo, Banfield, Colón y Aldosivi.

“Circunstancias relevantes como la asignación de cupos para torneos internacionales omitiendo la aprobación del Comité Ejecutivo de AFA, lo que suscitó un estado de conflicto e incertidumbre en torno a la plaza del Club A. Tigre, como así también la negativa del Sr. Mariano Elizondo a reprogramar partidos del Torneo de la Superliga a los fines de que jugadores citados por la Selección Mayor puedan llegar a tiempo a las convocatorias para partidos internacionales, lo que implicó en muchos de los casos un despliegue logístico inusitado y altamente oneroso para que un jugador pueda llegar al aeropuerto, son muestras claras que la SAF no tiene como objetivo la defensa de los intereses del fútbol argentino en su totalidad”, es el final de una carta que fue enviada previamente a la sede de la Superliga en los primeros días del año antes de su publicación.

Este cortocircuito entre Viamonte y Puerto Madero tiene este momento cúlmine y la Selección Sub 23 como disparador pero, como bien señala el último párrafo citado viene de arrastre en el tiempo con un antecedente fuete en la decisión unilateral de la clasificación a los torneos internacionales en la temporada pasada con Tigre como eje principal. Con seguridad este no será el último capítulo y tendrá nuevos en el futuro.