(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Ya es una guerra abierta entre el Real Madrid y el Barcelona con Neymar como objetivo. El club Culé dejó de jugar a las escondidas y ya juega a cara descubierta para repatriar al craque. El Madrid espera agazapado sabiendo que, puesto a elegir, el PSG se decantará por el elenco del Paseo de la Castellana.

Por eso, en las últimas horas, recrudeció la ofensiva del Barcelona. La tapa de "Marca" incluso, señala que Lionel Messi levantó el teléfono - una forma de decir - y llamó a su amigo. ¿El objetivo? Disuadirlo que se mude a Madrid y que, en cambio, ponga proa rumbo a Barcelona. 

En paralelo una delegación culé se trasladó hasta París para pelear, en vivo, por el jugador. El PSG no quiere saber nada con venderlo a Cataluña, pero tiene a su afición demandando que el brasileño abandone Parque de los Príncipes. ¿El gran problema? Que el Real Madrid aún no movió ninguna ficha por el brasileño, ya que su prioridad es otra ahora mismo: finiquitar y hacer caja con las salidas de Bale, Mariano y James. Pero, está expectante a lo que suceda.

Mientras, del lado Blaugrana, viajaron a parís el directivo Javier Bordas, el secretario técnico Eric Abidal y el empleado del club André Cury. Ellos se sentarán con Leonardo y buscarán conseguir fumar la pipa de la paz. Parece difícil. ¿Y Al-Khelaiffi? El dueño del club debe hacer equilibro entre una afición que no tolera más a Neymar y que la salida de Ney deje en el club de París el dinero que ellos consideran apropiado. En ese sentido, el reloj es el mejor aliado del Barça.

Además de para destrabar la relación, los directivos azulgranas viajan con una oferta que pondrán sobre la mesa del club galo. Por lo que publicó "Marca", el Barça insistirá en poner menos dinero, pero sí ofrecer jugadores a cambio, como por ejemplo Philipp Coutinho. 

El 31 de agosto cerrará el libro de pases, aún quedan muchos días y lo que ocurra hoy en París dificilmente pueda ser definitivo. Eso sí, el Barça dejó de esconderse y va por Neymar a cara descubierta. Y Messi, quién más lo quiere de nuevo en Cataluña, también mueve sus fichas.