Los bancos de suplentes son lugares de sumo interés durante el desarrollo de un partido. Sin embargo, son aún más protagonistas cuando el DT que está a cargo no logra los resultados deseados y el club decide despedirlo.

Este es un evento que (como en todos lados) se repite frecuentemente en los equipos que componen el Brasileirao, la Primera División del fútbol brasileño. Por eso, el año pasado la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) impuso una nueva normativa luego de una polémica votación: solo se permitía despedir un director técnico por temporada, salvo renuncia o acuerdo mutuo entre las partes.

La norma se aprobó con 11 votos a favor y 9 en contra, entró en vigencia a fines de mayo y desde las CBF sostenían que “supondrá una relación más madura y profesional y permitirá trabajos más prolongados y consistentes. Es el fin del juego de las sillas”.

Hoy, a menos de un año de aquella decisión, los clubes que componen el Brasileirao decidieron anular la restricción. En su presentación a la CBF, informaron que la regulación no disminuyó el porcentaje de técnicos despedidos.

Según un estudio publicado el año pasado, que analizaba de 2003 a 2018, la liga de Brasil es la que más cambia de entrenadores, con un promedio de 37,1 cambios por temporada. Le siguen la Primera y Segunda División de España (27,6), Argentina (21) y Colombia (11,3), precisa el estudio, realizado por los académicos Matheus Galdino, Pamela Wicker y Brian Soebbing.