(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez disparó contra el máximo dirigente de la FIFA, Gianni Infantino. En diálogo con Clarín, se refirió a los dichos del suizo, quien había dicho que el fútbol va a cambiar luego de la pandemia.

"Es legítimo que el presidente de la FIFA tenga ideas sobre el fútbol... más vale... lo que sí es que esos cambios de los que habla deben darse de forma institucional. Hay un Consejo Ejecutivo de la FIFA y hay un Buró que integran los presidentes de las 6 Confederaciones. Los cambios deben discutirse, aprobarse o rechazarse en esos ámbitos", expresó. Luego, agregó: "Entonces, en este momento crítico que vive el mundo, no solo el fútbol, hablar de cambios no es correcto. En ese momento hay que ser solidarios con la humanidad, no pensar en la política. Es inoportuno que un líder hable de política cuando hay que trabajar con la solidaridad y con los hechos".

Por su parte, disparó sobre los dichos de Infantino. "Me sorprende que el presidente de la FIFA diga 'vamos a dar un paso atrás'. Yo daría un paso atrás si me equivoqué pero no veo que el fútbol se haya equivocado. Uno ve la Champions, una competencia organizada y respetada. O la Libertadores, que dio un salto cualitativo enorme, o el reconocimiento por el Mundial de Rusia o el Mundial femenino de Francia que batió récords de presencias y audiencias... Entonces me cuesta entender cómo alguien habla de dar un paso atrás", comentó.

En tanto, Domínguez señaló que no entendió por qué Infantino expresó esa declaración. "Para mí, uno da un paso atrás cuando se equivocó. Y no veo que el fútbol se haya equivocado en nada, al contrario. El fútbol ha dado pasos hacia adelante, sobre todo el femenino", consideró. Por último, cerró con una conclusión: "Está bien que tenga sus ideas pero no se puede ser oportunista. Ahora hay que ser solidario, estar al lado del fútbol y de la gente".

Por su parte, se refirió a su relación actual con Claudio Tapia y AFA. "Hubo algún episodio, algún roce de esos que suceden en el fútbol porque todos queremos ganar. Pero tengo una excelente relación con Chiqui (Tapia), soy su amigo personal y tengo otros amigos en el fútbol argentino", expresó. Sin embargo, aclaró: "Desde la Conmebol pero toca proteger los derechos de todos.Y eso está por encima de todo. Los 10 presidentes pelean por sus asociaciones y yo estoy para lograr el equilibrio, que cada uno tenga sus respuestas, sin perjudicar los otros".

Semanas atrás, Infantino había opinado que en el fútbol se podría aprovechar los efectos de la pandemia para repensar el deporte. "Hace falta estudiar el impacto global de esta crisis. Ahora es difícil, no sabemos cuándo volveremos a la normalidad. Pero fijémonos en las oportunidades. Quizás podamos reformar el fútbol mundial dando un paso atrás. Con formatos distintos. Menos torneos, pero más interesantes", señaló, en diálogo con La Gazzetta dello Sport.

Cabe destacar que existe una tensión entre FIFA con Conmebol y UEFA. Ambas confederaciones decidieron dejar atrás sus diferencias y nuclearse afianzando sus vínculos para ser un contrapeso a la conducción de Infantino. El disparador de este nuevo orden fue que el presidente de FIFA tuvo la idea a fines del año pasado de recibir a la Asociación Mundial de Clubes y generó un diálogo directo con los clubes, esquivando a las entidades continentales.