Una negociación que finalice con la módica suma de €280 millones no es para cualquiera. Barcelona está dispuesto a ceder el nombre de su estadio tras llegar a ese acuerdo con la plataforma de música Spotify y eso no parece haberle caído bien a Ferran Reverter, CEO de la institución catalana que decidió dar un paso al costado.

Reverter asumió su cargo hace poco más de siete meses. Según varios medios españoles, la relación con Laporta y compañía siempre fue correcta, pero remarcan que tenían marcadas diferencias en cuanto a la administración del club. Estas diferencias se pusieron de manifiesto al momento de negociar con Spotify.

Barcelona comunicó oficialmente “Ferran Reverter ha comunicado este martes al presidente del FC Barcelona Joan Laporta su voluntad de dejar el cargo por razones personales y familiares. Esta renuncia será efectiva a partir de que el Club incorpore a un nuevo director general”. Esto último podría no ser de manera inmediata, por lo que Reverter se quedaría en el cargo hasta tanto suceda.

Por su parte, Reverter aseguró: “Hace casi un año decidí dejar Alemania y volver a Barcelona por motivos familiares. Poco después acepté el reto que me ofreció el presidente Joan Laporta de dirigir el área ejecutiva del Club. Estos meses han sido apasionantes y agradezco al presidente su confianza y, especialmente, su entusiasmo y capacidad de liderazgo para que el FC Barcelona cuente en estos momentos con un equipo directivo de primer nivel capaz de volver a posicionar al Barça como líder mundial".

El ex CEO cerró diciendo: "Personalmente he puesto un gran esfuerzo y dedicación durante estos meses, pero ahora quiero centrarme en el propósito por el que volví a Barcelona, que es dedicar más tiempo a proyectos personales y familiares”.

Reverter es considerado el arquitecto del proyecto de recuperación económica del club y su criterio fue clave para, por ejemplo, no aceptar el acuerdo de LaLiga con el fondo CVC y en la decisión de no renovar nada más y nada menos que a Lionel Messi.