(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El médico de Diego Armando Maradona, Leopoldo Luque habló ante los medios tras los allanamientos realizados en su domicilio y en el consultorio médico. Contó cuál era la relación que mantenía con el 'Diez' y brindó detalles sobre el alta que recibió tras la operación por el hematoma subdural.

"Todavía no estoy informado de los cargos, ellos vinieron de un modo que uno no espera, y luego de trabajar como lo hice por Diego Maradona. Abrimos las puertas y le dimos toda la información que necesitaban", indicó, sobre el allanamiento. "Cuando Diego fallece, yo llegué al lugar y estaba la Fiscalía trabajando. Son procedimientos legales que desconozco, sé cómo trabajé", agregó.

Por otro lado, comentó cuál era el tipo de relación que mantenía con Maradona. "Me dicen médico de cabecera, y yo era neurocirujano. Diego odiaba a los médicos, odiaba a los psicólogos, odiaba a todo el mundo, en cuanto a salud. Conmigo era diferente, porque yo era genuino y no buscaba una foto", describió Luque. Además, reconoció que el 'Diez' lo echó "un montón de veces" de su casa, pero después se comunicaban. "Yo hacía sugerencias que él aceptaba o no. Yo lo acompañaba, así funcionaba. El resto de las cosas que hablan son estupideces que dañan la memoria de Maradona".

Por su parte, Luque reconoció la pelea que se mencionó durante la semana anterior en la casa de Maradona, pero le bajó el tono: "Diego sabía quién era yo. Esa pelea que se dice fue una pelea común como las que teníamos siempre, donde me echaba y después volvía". "Todo lo que hice fue de más, no de menos", destacó. "A Diego no le podías manejar nada. No se le imponían las cosas, él hacía lo que quería".

En tanto, Luque se refirió a la salida de la clínica, tras la operación de un hematoma subdural. "Yo quería que Diego se levante, si no quería ni recibir a las hijas. La parte neurológica ya estaba, el control era perfecto. Alcohol tampoco estaba tomando, y los medicamentos estaban habilitados por el equipo psiquiátrico", señaló. "Todos estuvimos reunidos para ver qué era lo mejor para Maradona. Lo que necesitábamos es su voluntad, porque sin Diego no se podía hacer nada", agregó. "Me siento responsable de amarlo, de cuidarlo, de extenderle la vida y mejorarla hasta lo último. Cuando decían que él estaba dopado, Diego me decía '¿y vos le das bola? Si boludos son los que sobran'"

"No hay un error médico, ni tampoco de criterio. Maradona tuvo un ataque cardíaco, que es lo más común del mundo morir así. Es un hecho que podía pasar. Siempre se hizo lo posible para disminuir esa chance, pero no para bloquearlo", concluyó el neurocirujano.