El presidente de FIFA, Gianni Infantino, afirmó que Luis Rubiales “empañó” las celebraciones de la selección española en el Mundial Femenino al besar en la boca a la jugadora Jenni Hermoso.

“La merecida celebración de estas magníficas campeonas se vio empañada por lo que sucedió tras el pitido final”, escribió Infantino, a la vez que añadió: “Y lo que siguió ocurriendo en los días posteriores. Esto no debería haber ocurrido nunca. Pero sucedió, y los órganos disciplinarios de la FIFA asumieron inmediatamente su responsabilidad, tomando las medidas necesarias”.

Luego, continuó: “Los procedimientos disciplinarios seguirán su curso legítimo. Por nuestra parte, debemos seguir centrándonos en cómo seguir apoyando a las mujeres y al fútbol femenino en el futuro. Dentro y fuera del terreno de juego”.

El organismo rector del fútbol mundial le abrió un expediente disciplinario a Rubiales, dirigente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), y lo suspendió de toda actividad relacionada con el fútbol durante tres meses, tras besar a Hermoso durante la ceremonia de entrega de trofeos tras la final del 20 de agosto.

Hermoso, de 33 años, dijo que el beso no fue consentido, mientras que Rubiales, quien primero llamó "idiotas" a los críticos y luego pidió disculpas, afirmó que el beso fue inocente y consensuado y se negó a dimitir a pesar de las crecientes críticas y peticiones de renuncia.

Por otro lado, la Fiscalía española abrió una investigación preliminar para determinar si Rubiales, de 46 años, pudo cometer un acto de agresión sexual. En tanto, la selección española campeona del mundo y otras 32 jugadoras declararon que no volverán a jugar con el equipo nacional bajo la actual dirección.

Nuevo comunicado de FIFPRO: “La gobernanza está fallando; la responsabilidad está fallando”

El Sindicato de futbolistas volvió a pronunciarse en favor de Jenni Hermoso y exigió cambios. “Contigo, Jenni. Tu lucha es mi lucha. Su lucha es nuestra lucha. Y ya hemos tenido suficiente. Nosotras, las jugadoras, somos más fuertes, estamos más unidas y más decididas que nunca. Exigimos un cambio. Exigimos mejoras”, indican.

“Los sistemas están fallándonos. La gobernanza está fallándonos. La responsabilidad está fallando. La discriminación está enraizada y ocurre a todos los niveles. El fútbol debe responder y alzarse en este momento crítico. No solo en España, sino en todo el mundo”, agregan.