Cristian Riquelme, el hermano Juan Román, el vicepresidente de Boca Juniors, volvió a pedir postergar la indagatoria fijada para este miércoles, en la causa en la que está como acusado de haber integrado una asociación ilícita dedicada a la reventa de entradas en La Bombonera.

El pedido de postergación fue presentado por el abogado Sebastián Rodríguez, defensor de Cristian Riquelme, ante el juez en lo penal y contravencional Pablo Casas.

La indagatoria ya había sido postergada la semana pasada y se fijó para este miércoles. También están citados el secretario de Boca, Ricardo Rosica, la periodista Antonella Pepe y otras personas más.

Ahora, la defensa de Rodríguez cuestionó que el delito de asociación ilícita y administración fraudulenta no tiene competencia la Justicia penal y contravencional, sino la Justicia nacional, por lo que no pueden seguir actuando. Incluso, la defensa negó que haya habido reventa tal cual se los acusa, pues adelantó que uno de los casos las entradas fueron comercializadas por una ticketera y fue un partido con Talleres de Córdoba en esa provincia y el otro caso, se le dio una entrada a un entrenador del Atlético Madrid y no existió ningún tipo de comercialización.

Además, el abogado dijo que ese mismo día en que está citado Riquelme tiene otro compromiso por otra causa que tiene su estudio. La sospecha es que todos participaban de la reventa de entradas y lo hacían a nivel masivo, principalmente operando con contingentes de turistas. Por eso, la sospecha refiere a connivencia con las autoridades del club y con la Policía, pues es muy difícil no tomar conocimiento del ingreso de la gran cantidad de personas por los canales no habituales. 

Esa sospecha es de un circuito paralelo institucionalizado y por eso se investiga a gente del club, por lo cual el hermano de Riquelme y el resto están imputados por asociación ilícita, por la reventa de entradas y defraudación al Club Boca Juniors. 

Incluso, las tareas de inteligencia que llevó a cabo la fiscalía dieron con un domicilio conocido como "La casa del 10", ubicado a pocas cuadras del estadio, donde se reúne al contingente que luego ingresa con la reventa al estadio. Con el avance del caso es que se allanó la propiedad de Cristian Riquelme y demás imputados en búsqueda de pruebas, las cuales incluyen intervenciones telefónicas.