Con diez goles en contra en tan solo tres partidos no cuesta mucho darse cuenta que el problema de Tigre está en defensa. Muchos pensaban que el arribo de Sava iba a solucionar cosas de mitad de cancha para adelante, de manera que pueda dar un paso adelante y colarse en los puestos de clasificación copera. Pero eso, no está pasando. Muy por el contrario, se presentó un problema aún mayor: en tres partidos le metieron la mitad de los goles que le habían metido en los 17 partidos anteriores. Con Troglio, en esa cantidad de partidos, en Victoria habían ido a buscar la pelota adentro del arco 20 veces. Con Sava, diez veces en tres partidos.

“Al paso que llevamos, vamos a terminar en los últimos puestos y con los descenso en masa que se vienen, es un riesgo”, se escuchó decir en el José Dellagiovanna.

Ahora, la excursión a Santa Fe para enfrentar a Colón representa un viaje de riesgo. Los de Domínguez encadenaron cinco victorias al hilo, están invictos en lo que va del año y prometen extender el mal paso de la defensa del Colorado Sava. ¿Habrá espectáculo?