Solo pudo dirigir una práctica y, por la presión popular, tuvo que dar por terminado su corto ciclo como entrenador de Estudiantes. Lucas Nardi se presentó en el Country Club de City Bell, donde debía realizar su segundo entrenamiento, y resolvió dar un paso al costado. "Esta mañana cuando llegué al club vi y sentí que el clima, sobre todo de la comisión directiva. No estaba bien, y yo soy el primero en querer trabajar en un ambiente adecuado", afirmó quien era el DT de la Reserva hasta el fin de semana.

“Uno no lo generó, pero cuando te acusan es difícil revertir situaciones, más con el hincha. Si ellos no confían en mi...”, explicó Nardi en relación al tuit publicado hace cuatro años en su cuenta que dice “Odio a Bilardo”. El martes, con el escándalo ya desatado y los hinchas pidiendo su salida del equipo, Nardi había dicho que él no manejaba entonces la cuenta de Twitter que llevaba su nombre.

El técnico agregó en charla con Sportia: “Yo estaba fuerte y tranquilo porque no pienso eso. Pero no importa lo que yo piense”.

“Lo mejor para Estudiantes es darle tranquilidad al club y al presidente que me dio la oportunidad”, añadió Nardi sobre su decisión. “Era lo más lógico y conveniente para todo el equipo”.

“Me quedo sin esta posibilidad por situaciones externas que no siento ni pienso. Lamentablemente no pude demostrar mi trabajo en lo que mejor sé hacer”, se lamentó el entrenador.