No hay dudas que, a nivel futbolístico, Ángel y Oscar Romero son de los dos mejores valores que tiene San Lorenzo. Pero, en lo extrafutbolístico, toda su influencia se ve de la misma manera, pero para mal. Conflictivos, sin caer del todo bien en el grupo y acusados de hacer "lo que quieren" los Romero terminan siendo, a veces, un dolor de cabeza.

Diego Dabove plantó bandera de entrada. No los puso en el debut ante Arsenal, el equipo ganó y el mensaje fue claro: acá no hay coronitas. Advirtió que "no hay nada extraño" con su decisión y los devolverá al 11 titular ante Liniers, por Copa Argentina. Lo cierto es que el DT no quiere "lola" con los hermanos y no quiere darles ni 1 centímetro de ventaja. No quiere que nadie le maneje el vestuario. Con el grupo, por otra parte, la relación siempre fue tirante y con episodios como la fractura al chico Herrera esa tirantez no hizo más que aumentar. 

Sin embargo, el status de intocable cambió para ellos. Hoy, para San Lorenzo son "negociables" al igual que cualquier otro jugador del plantel. ¿Qué base económica pone el club? Según pudo saber Doble Amarilla, al menos, apuntan a recuperar la inversión, que se hizo en torno a los u$s 4 millones. 

¿Dónde podrían ir los conflictivos hermanos? Dada la situación de los mercados y lo que ganan en el Ciclón, sólo Brasil y México aparen como destinos posibles en el hoy por hoy. El libro aún no abrió en el vecino país y no se descarta alguna oferta de aquellos lados. Sí hubo un sondeo desde México, pero quedó en eso. Lo concreto es que los Romero ya no son intocables y, como el resto de sus compañeros, están a la espera de una oferta.